“La muerte no es verdad cuando se ha cumplido bien la obra de la vida; truécase en polvo el cráneo pensador; pero viven perpetuamente y fructifican los pensamientos que en él se elaboraron”. José Martí escribía estas palabras un cinco de marzo, pero de 1876. Coincidentemente, también un cinco de marzo, pero del 2013, deja de existir físicamente el Presidente de Venezuela, Hugo Chávez.
Las 33 naciones que integran la CELAC tienen una historia común, constituyen la tercera potencia económica del mundo, el tercer mayor productor de energía eléctrica y el mayor productor de alimentos, cuenta con la mayor reserva de agua dulce del mundo y tiene un producto interno bruto (PIB) de unos siete billones de dólares.
He citado sólo una pequeña parte de los esfuerzos que durante 54 años se han hecho para destruir la Revolución cubana. En los últimos años se sigue intentando crear una oposición interna, pagada desde Estados Unidos, pero el pueblo cubano se mantiene firme al lado de su Revolución y la defenderá contra todos los que quieran destruirla desde fuera o desde dentro.
No se trata de una consigna vacía, es que Chávez y su partido han penetrado en el corazón del pueblo, que sus ideas han echado raíces y se consolidan y crecen como un árbol gigante.
Las noticias informan que la venta de autos de lujo creció este año en todo el mundo y que especialmente las de BMW han tenido avances sólidos y ventas récord en el mes de septiembre. Por ejemplo, en Argentina, los autos Porsche, Mercedes, Audi y BMW, han tenido un aumento en las ventas de 11 por ciento.
Los avances médicos, oportunidades de carreras para las mujeres, la escasez de viviendas, el alto costo de la vida y la emigración son factores que inciden en el problema del envejecimiento poblacional que plantea retos para el gobierno de Cuba.
Fueron acusados de espías; sin embargo, ellos no se infiltraron en ninguna organización del gobierno, sino en grupos que preparan acciones terroristas contra Cuba. Por qué el gobierno los acusa de espías si se infiltraron en grupos terroristas?
Muchas personas hablan o escriben sobre la necesidad de cambios en el mundo. Y no les falta razón, sólo que la petición o la exigencia de cambio no la dirigen hacia el lugar correcto.
En Cuba no habría que hablar de reforestación, si no se hubiera deforestado el territorio para sembrar caña, construir ciudades y carreteras y también para la ganadería y la siembra de otros cultivos.
Yo, que nací y me crié en el campo, conocí casos de adolescentes y jóvenes con vocación para la música, que nunca pudieron tener un instrumento en sus manos, ni pagar a un profesor para que les enseñara, aunque fuera lo elemental en ese campo.