Jornada cubana contra la homofobia

Text and Photos by Irina Echarry

HAVANA TIMES, May 17 — Por cuarto año consecutivo los gays y lesbianas tienen unos días de reconocimiento. La Jornada Cubana Contra la Homofobia, es momento para escuchar conferencias, debates y emitir criterios en torno al tema de la homofobia. A la vez que se visualiza el gran problema que genera la homofobia,  se reconoce que en Cuba existe una amplia y creciente comunidad gay que sueña con ser aceptados por el resto de la comunidad.

Este año la actividad central se realizó en El Mejunje, centro cultural dedicado a la diversidad, con un trabajo favorable mantenido  durante mucho tiempo y que se encuentra en la provincia de Santa Clara.

La capital no está exenta de actividades, del 11 al 18 de mayo se realizan paneles, videos debates, conferencias, ciclos de cine y hasta una conga arroyó el sábado 15 por la calle 23 ante la mirada de los transeúntes y con apoyo policial.

Un rato antes, en el cine La Rampa se habían reunido los gays y lesbianas para escuchar experiencias de personas extranjeras y nacionales que viven su sexualidad sin tener en cuenta  la complacencia de los demás.

También se expresaron inquietudes: ¿qué tiempo falta para que los gays y lesbianas tengan amparo legal?   Esa es una de las preocupaciones constantes que se han venido planteando a lo largo de estos cuatro años y que sigue sin solución.

La demanda de un espacio donde puedan conocerse, divertirse y demostrar su afecto como les venga en ganas, sin represión de nadie, sin cohibirse, es otro de los reclamos. Esta vez se hicieron propuestas de locales inutilizadas donde, con el apoyo de todos y todas, podría funcionar un centro que los acoja.

Por unos pocos días la comunidad gay sale a la calle, es vista y sentida por muchos, descubierta por otros. Es una pena que solo sean unos días. Las calles son del pueblo que las vive y los gays y lesbianas son parte de este pueblo. Tienen tanto derecho como los demás a caminar por ellas sin ser humillados por los policías, sin ser marginados por la sociedad, sin ser ignorados y sin tener que reprimirse.

La jornada contra la homofobia debe durar todo el año, solo así la gente homofobica se acostumbrará a la idea de convivir con las diversas orientaciones sexuales y poco a poco, llegará la aceptación verdadera.