El gobierno cubano y su deseo de “corregir distorsiones”
y reimpulsar la economía en 2024
Por Benjamín Noria
HAVANA TIMES – Estaba releyendo hoy en la página 2 del periódico cubano Granma de fecha 21 de diciembre de 2023, la columna que se titula: Romper la inercia para crecer en la economía requiere corregir distorsiones.
Se trata sobre: Las proyecciones de gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía en 2024, presentadas por Manuel Marrero, Primer Ministro de Cuba.
En el quinto párrafo se plasma que: “significó que, desde el Gobierno central y sus instituciones, se evidencia que no se ha articulado adecuadamente las capacidades para ejercer el control en la implantación de políticas y actividades sobre los sectores ramales, la economía y los servicios, y estas son cuestiones que tenemos que transformar en 2024”. Además, dijo que “se necesita un Ministerio de Economía más fortalecido, que ejerza su verdadera función y quitarle aquellas que lo han separado de su actividad principal”.
Ahora bien, en mi opinión no son los discursos ampulosos y demagógicos los que van a cambiar la economía del país, sino la libertad de expresión, la economía libre de mercado, la libertad de prensa y otras libertades civiles y políticas que garantizan la democracia en un país.
Si nos fijamos bien, este es el mismo discursito de todos los años y Cuba ha seguido en las mismas condiciones durante 65 años de revolución. Las únicas precauciones y medidas que ha tomado el gobierno cubano son para mantenerse en el poder y no para cambiar el sistema económico ni desarrollar al país.
Qué cansones y pesados son los dirigentes que integran el gobierno cubano. En verdad aburren con las mismas palabras una y otra vez. Son tan repetitivos como los papagayos.
A regañadientes, consintieron a partir del año 2022 la creación de pequeños y medianos negocios privados y le dieron luz verde a la actividad del trabajo por cuenta propia porque no les quedaba más remedio si querían mitigar los efectos del desabastecimiento que existe y calmar los ánimos del pueblo que todavía se sienten caldeados.
El gobierno cubano cada día está más aplastado por el descrédito. No ha habido ninguna estrategia económica que les haya dado resultado. Están llevando al país al suicidio económico. Sin embargo, parece no importarles, por el hecho de que siguen andando sobre los mismos pasos de sus estupideces y aberraciones.
Mientras sigan ellos en el poder, los aires no serán propicios para realizar el derecho a la felicidad del pueblo cubano. Ellos son repelentes de la prosperidad y secan todo lo que tocan con la mano. Conspiran contra el progreso unas mentes retrógradas y una distorsionada ideología. Es imposible que algo crezca en estas circunstancias. No resultará fácil lograr sacar adelante a la nación bajo un grupo mafioso despropositado y corrupto que no desean renunciar al poder y a los lujos con que viven.
A los abusivos y opresores del gobierno cubano les hace falta un personaje como el de las aventuras del Zorro que con su látigo haga reivindicar la Justicia para el pueblo.