Ortega dice que no se irá y Nicaragua vive nueva jornada de violencia

Por Gabriela Selser (dpa)

Daniel Ortega y Rosario Murillo. 30-5-2018.

HAVANA TIMES – El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, advirtió hoy que no abandonará el Gobierno, al responder a las demandas de sus adversarios que le han instado a retirarse del poder, mientras nuevos incidentes dejaron al menos dos muertos y diez heridos tras una multitudinaria marcha opositora.

“Nicaragua nos pertenece a todos y aquí nos quedamos todos”, dijo el mandatario, al hablar ante unos miles de simpatizantes reunidos en una avenida de Managua y referirse así por primera vez a una eventual salida del Gobierno.

“Nicaragua no es propiedad privada de nadie, la dueña de Nicaragua somos todos los nicaragüenses, independientemente de nuestros pensamientos políticos, religiosos e ideológicos. Dios nos dio esta tierra a todos”, afirmó.

La concentración del gobierno del 30 de mayo, 2018.

Ortega dijo comprender “el dolor de las madres” que perdieron a sus hijos en los enfrentamientos ocurridos desde abril, pero sostuvo que “ese dolor inmenso no puede llevar a la destrucción de las familias nicaragüenses, no puede llevar a la muerte y a la guerra nuevamente”.

“Estamos viviendo momentos en los que el odio está sacando las uñas”, señaló en referencia a las demandas de estudiantes, empresarios y la sociedad civil para que se retire del Gobierno y se realicen elecciones anticipadas.

“El odio, el demonio, están sacando las uñas para destruir un país que tenía paz, una Nicaragua que era admirada en el mundo por su capacidad de reconciliación”, aseveró.

Ortega habló después de que, en otro sector de Managua, cientos de miles de personas, muchas de ellas mujeres vestidas de negro, marcharan pacíficamente para exigir “justicia” para sus hijos muertos y reclamar la renuncia del mandatario.

Al final de la marcha, paramilitares atacaron con armas de fuego y bombas caseras. No existen cifras oficiales sobre víctimas y heridos entre los manifestantes, pero el canal 15 de televisión indicó, citando fuentes médicas, que “la masacre dejó varios muertos y veintena de heridos”, varias de ellas por impactos de bala.

Mientras, el subdirector de la Policía, comisionado Francisco Díaz, dijo que cinco agentes policiales y siete civiles resultaron heridos por “grupos delincuenciales de la derecha” tras una marcha de apoyo al Gobierno. Dos de los civiles eran miembros de la progubernamental Juventud Sandinista y fallecieron después, indicó.

El jefe policial agregó que desconocidos también causaron daños en el nuevo estadio de béisbol de Managua y volvieron a quemar las instalaciones de la emisora oficialista Nueva Radio Ya.

La marcha masiva del 30 de mayo, encabezada por madres que perdieron sus hijos en la represión gubernamental de abril y mayo.

Casi simultáneamente, grupos violentos atacaron a pedradas las instalaciones del canal 15 de televisión (100% Noticias) y dañaron la planta transmisora de Radio Darío en la ciudad de León (occidente).

Ambos medios de comunicación son críticos del Gobierno.

La televisora, que fue censurada en abril por transmitir las protestas de estudiantes, transmitió en vivo el ataque de hombres que destruyeron a pedradas los ventanales del edificio. El director del canal, Miguel Mora, responsabilizó al presidente por el ataque.

Radio Darío, que ha quedado fuera del aire, había sido atacada e incendiada por paramilitares el 20 de abril, tres días después del inicio de las protestas estudiantiles contra el Gobierno.

Las protestas contra Ortega comenzaron por una reforma al Seguro Social que tocaba el sistema de pensiones, y se agudizaron tras la violenta acción de la Policía y paramilitares contra ciudadanos desarmados.

Según el Gobierno, 24 personas habían muerto hasta ayer producto de esta crisis, pero Amnistía Internacional (AI) registra al menos 83 fallecidos desde que comenzaron las protestas, el pasado 17 de abril.

En tanto, el Gobierno de Nicaragua accedió hoy a la creación de un grupo internacional de expertos que investigue la violencia durante las recientes protestas.

La decisión oficial nicaragüense quedó plasmada en un documento firmado por el secretario general de la OEA, Luis Almagro;, el secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Paulo Abrao, y el canciller nicaragüense, Denis Moncada, informó la comisión en Washington.

El mandato del Grupo Interdisciplinario de Expertos Internacionales (GIEI) será de seis meses, pero podrá extenderse por acuerdo de las partes, según consta en el documento.

La creación del GIEI fue una de las 15 recomendaciones de un equipo de la entidad autónoma de la OEA que visitó Nicaragua. El grupo lo integrarán cuatro personas “de alto nivel técnico y reconocida trayectoria en la protección de los derechos humanos” seleccionadas por la CIDH, se indicó.