La fiscal Ortega acusa a Maduro de corrupción y dice tener pruebas

Por Isaac Risco (dpa)

HAVANA TIMES – La ex fiscal venezolana Luisa Ortega acusó hoy de corrupción al presidente Nicolás Maduro y a Diosdado Cabello, el número dos del chavismo, y aseguró contar con las pruebas necesarias, que prometió compartir “con distintos países”.

Ortega, una antigua simpatizante chavista convertida ahora en un una crítica tenaz de Maduro, virtió las acusaciones en Brasil, un día después de que el mandatario asegurara que pedirá una orden de captura internacional a Interpol contra ella.

“Las pruebas las tengo conmigo y voy a cederlas a algunos Estados para que procedan a enjuiciar a las personas que corresponda”, aseguró Ortega durante una reunión de fiscales a la que fue invitada en Brasilia.

“A Nicolás Maduro, Diosdado Cabello, (el vicepresidente venezolano) Jorge Rodríguez y a todos los que estén involucrados en eso”, enumeró.

Las acusaciones más concretas estaban dirigidas contra Cabello, uno de los hombres fuertes del chavismo desde los tiempos del fallecido presidente Hugo Chávez, y hoy miembro de la controvertida Asamblea Nacional Constituyente venezolana.

Ortega lo acusó de haber recibido sobornos por 100 millones de dólares a través de una empresa en España en relación con el caso de la constructora brasileña Odebrecht, implicada en escándalos de corrupción por todo el continente.

Sobre Maduro aseguró que controla con una firma suya el sistema de reparto de alimentos en Venezuela, el del lllamado CLAP (Comité Local de Abastecimiento y Produccción), con el que el Gobierno intenta afrontar la grave crisis alimentaria en el país y al que la oposición considera como parte del aparato de corruptelas.

El control, según Ortega, se ejerce a través de una compañía mexicana. “Es un empresa registrada en México, a nombre de dos personas. Es una empresa que se presume que es del presidente de la república, Nicolás Maduro”, comentó.

La ex fiscal pidió también a otros países que no confíen en las actuales autoridades venezolanas ni les pidan colaboración, porque en “Venezuela no hay garantías”. “La estabilidad de la región está en peligro”, agregó Ortega, que estuvo en la reunion de fiscalías de Estados miembros o asociados al Mercosur como parte de la delegación brasileña, ya que no tiene ya cargo público.

El alcance de las acusaciones era difícil de estimar en un primer momento. Ortega mencionó explícitamente a España, Colombia y Estados Unidos como algunos de los países a los que dará acceso a los documentos que dice haber sacado de Venezuela en su huida.

El Gobierno venezolano rechazó sus declaraciones. El fiscal designado como su sustituto, Tarek William Saab, la acusó de haber sido “negligente” con la corrupción y la descalificó como una “turista mundial”, aludiendo a acusaciones del chavismo de que su esposo y ella se enriquecieron cuando eran funcionarios.

Está “tratando de enlodar sin ninguna entidad”, dijo Saab desde Caracas.

Ortega centró hoy la atención de una reunión más bien administrativa en Brasilia por las circustancias de su salida de Venezuela y su creciente oposición desde hace meses a Maduro, al que acusa de intentar cimentar una dictadura.

“Abandoné mi patria, mi país, porque estaba siendo víctima de hostigamiento y persecución por parte del Gobierno de Nicolás Maduro”, dijo en Brasilia.

La ex funcionaria venezolana huyó el viernes pasado primero en lancha a Aruba y voló desde ahí a Bogotá. El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, comunicó el lunes que su Gobierno la protegía y ofreció darle asilo si lo solicitaba.

Brasil, otro de los países críticos con Venezuela, también se mostró hoy dispuesto a otorgar refugio a Ortega, después de calificar su caso como “persecución política”. Si lo pide, el pedido sería concedido “inmediatamente”, dijo al canal Globo News el canciller brasileño, Aloysio Nunes, tras reunirse con ella.

Nunes también aseguró que Ortega prefiere asilarse en Sudámerica. En los últimos días se ha especulado con que la ex fiscal pueda trasladarse en algún momento definitivamente a Estados Unidos. Ortega dijo en Brasilia que decidirá todavía esta semana dónde se asilará y que volverá por ahora a Colombia.

En la reunión en la capital brasileña participaron representantes judiciales de varios de los países más críticos de la región con el Gobierno de Maduro, entre ellos Argentina, Chile, Perú y Paraguay, además de los anfitriones.

Todos ellos condenaron dos semanas atrás la “ruptura del orden democrático” en Venezuela durante una cumbre en Lima. Ortega reiteró hoy sus acusaciones contra la Asamblea Constituyente de su país como una “forma de destruir la democracia”.

“Se va a perseguir a los adversarios políticos”, dijo la antigua funcionaria chavista. “No solamente es para perseguirlos, es para destruirlos”, agregó.