Gobierno y oposición venezolana se preparan camino a Constituyente
Por Néstor Rojas Mavares (dpa)
HAVANA TIMES – La oposición venezolana realizó el lunes manifestaciones simbólicas en centros de votación activados para la elección el domingo de una Asamblea Constituyente, en el comienzo de una semana que considera clave en su lucha para detener la polémica propuesta del presidente Nicolás Maduro.
El jefe de Estado venezolano, por su parte, reiteró su llamado a tener una Constituyente “de paz y soberanía”, y pidió “que nadie se ponga de lado de la decisión que tiene que tomar el país”.
“Vamos a convertir esta semana, del 24 al 30 de julio, en una semana de coraje valentía, de lucha por los valores patrióticos y el próximo domingo vayamos, llueve, truene o relampaguee a la Constituyente, que sí va por volutad del pueblo”, dijo Maduro en un acto militar por los 194 años de la creación de la Marina venezolana y los 234 años del nacimiento del Libertador Simón Bolívar.
Por la mañana, manifestantes opositores llegaron temprano hasta distintos centros de votación en el país donde dejaron colgadas pancartas en rechazo a la Constituyente, cuya elección de sus 545 miembros sigue adelante pese al rechazo nacional y amenazas internacionales.
En los centros electorales, ya bajo el control del plan militar de protección, muchos de ellos escuelas primarias, se dejaron pancartas con mensajes contra la Constituyente y rechazando el uso de esos lugares para la votación.
La diputada opositora Marialbert Barrios se refirió a una “semana crucial por la defensa de nuestra democracia y la república”.
La alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) llamó además a sus seguidores a acompañar las protestas de esta semana, que incluyen una huelga nacional de 48 horas el miércoles y jueves y una movilización el viernes, con cacerolazos todos los días a las 20:00 horas (local, 00:00 GMT).
Hasta ahora, la MUD no ha indicado si organizará manifestaciones el sábado y el domingo de las elecciones, aunque no las descartó.
Maduro exigió a la oposición que respete el derecho a voto de los venezolanos, mientras que el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, calificó como una provocación de “impredecibles consecuencias” las manifestaciones convocadas hacia los centros electorales.
La oposición está intentando llevar al Gobierno a una situación que lo obligue a suspender la elección constituyente, aunque Maduro hasta ahora sostiene que su propuesta seguirá adelante, incluso después que Estados Unidos amenazara con aplicar sanciones económicas si no la retira.
Sin la participación de la oposición, las elecciones se han reducido al sector oficialista, que casi con total seguridad dominará la Asamblea.
En la elección participarán como candidatos a la Constituyente la esposa de Maduro, Cilia Flores, y el segundo hombre del chavismo, Diosdado Cabello, alguno de los cuales podría asumir la presidencia de ese mecanismo.
Según Maduro, la Constituyente será plenipotenciaria, por lo que podrá reformar cualquier otro poder, por lo que la Asamblea Nacional (Congreso), bajo control opositor, prevé que una de sus primeras decisiones será disolverla.
El líder opositor Henrique Capriles advirtió sobre las consecuencias que traería el que se concrete la Constituyente, por lo que espera que esta semana se imponga la “sensatez”. Alertó especialmente sobre posibles sanciones económicas.
“Estas sanciones serían desastrosas para (la petrolera estatal) PDVSA y para todo el país, principalmente en los más pobres. ¿Saben las consecuencias de eso, señores del gobierno? ¿Que se acabarán las relaciones comerciales, económicas con esos países? ¿Con qué dinero se importará la comida y las medicinas? Ese sería un escenario que nunca antes habíamos vivido los venezolanos”, señaló.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció que debido a hechos de violencia en los alrededores de algunos centros de votación acondicionará varios centros temporales para que los electores puedan ejercer su derecho.
Uno de esos centros será el llamado “Poliedro” de Caracas, un coso techado para espectáculos masivos, usado con frecuencia por el Gobierno para actos políticos.