Carlos J. Finlay, parque y monumento (Fotorreportaje)

Por Irina Pino

HAVANA TIMES – En la esquina de Cuba y Amargura, en La Habana Vieja, frente a la Iglesia San Francisco el Nuevo, hay un pequeño bosquecito rodeado por una verja de hierro. Este lugar de paz, sombreado por hermosos árboles, es ideal para la meditación. Pero su peculiaridad radica en un monumento en honor al científico Carlos J. Finlay (1833-1915).

Este noble cubano, quien  también fue médico oftalmólogo, fue el descubridor del véctor trasmisor de la fiebre amarilla.

Sus primeros estudios fueron en Francia pero la Universidad de La Habana no reconoció sus grados académicos europeos.  Luego partió hacia los Estados Unidos donde se graduó en el Jefferson Medical College en 1855.

Durante años investigó la metaxénica, teoría basada en el agente trasmisor biológico.

En 1881, en la International Sanitary Conference, presentó su teoría sobre el mosquito de género Aedes (la hembra fecundada del Aedes aegipty) como trasmisor de la fiebre amarilla, y el control de la población del mosquito para evitar la propagación de la enfermedad. Pero su propuesta fue seguida de burlas e indiferencia.

Tuvieron que pasar más de 20 años, luego de la guerra Hispano-estadounidense, para que se creara una comisión siguiendo las indicaciones de Finlay de aislar a los enfermos y combatir la enfermedad.

Sus exhaustivas investigaciones dieron fruto, fue reconocido por la Walter Red Commission y se le acreditó por el descubrimiento del vector trasmisor de la fiebre amarilla. Lo nombraron titular de la Oficina de salud de Cuba entre 1902 a 1909.

Además de ser un hombre cultivado que hablaba varios idiomas, escribió artículos sobre el cólera, la lepra y las enfermedades de las plantas.

De carácter humanitario, ayudó a pacientes sin recursos económicos.

Obtuvo por su labor muchos reconocimientos, entre ellos la Orden Nacional de la Legión de Honor de Francia en 1908.

Carlos J. Finlay fue nominado siete veces al Premio Nobel de Fisiología/Medicina.

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5 thoughts on “Carlos J. Finlay, parque y monumento (Fotorreportaje)

  • Me gustan los fotoreportajes de Irina, nos yeva a lugares  extraordinarios con muy bellas imagenes de nuestro pais sobre todo en estos tiempo de covid. Felicidades

  • Me encanta el monumento, al inicio pensé que era algo alejado de la ciudad porque parece estar en un campo.

  • Muchas gracias por escribir sobre la cultura de cuba y de lugares que son casi olvidados, lindo reportaje, me gusto mucho.

  • Hola Irina muy bueno tu articulo esta muy bien actualizarnos de los logros de nuestros científicos y un hombre como Finlay que le dedico su vida a la ciencia y a la humanidad, conozco el Parque y su monumento muy agradable y está frente a la primera academia de la ciencia en la Habana Cuba 460.
    Gracias por tus fotos.

  • En la esquina de Cuba y Compostela???????

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