Actor Cubano con público infantil

Por Helson Hernández

Yerandi Basart Ramos

HAVANA TIMES,  11 julio — Yerandi Basart Ramos es uno de los mas destacados jóvenes exponentes del Teatro Infantil y de Títeres que se hace actualmente en Cuba.   “Lo que se convirtió en una aventura después devino en un problemas para mi.”

HT:  Graduado de la Escuela Nacional de Teatro?

YERANDI BASART RAMOS:  En el año 2005 me gradué en la especialidad de Artes Escénicas de la Escuela Nacional de Teatro.  Después de pasar 5 años estudiando en la escuela fue que comprendí el por qué de la actuación, pues antes quizás lo vamos haciendo con un carácter aficionado y la academia te facilita eso, conocer la historia de la manifestación y diferentes disciplinas que te ayudan, no a convertirte en actor en principio, sino mas bien a darle las herramientas al actor para ir formándose posteriormente en el oficio mismo.

HT: Pero sabemos que mucho antes, siendo aun niño, ya habías protagonizado importantes puestas en escenas de teatro infantil.

YERANDI BASART RAMOS:  Si, es muy difícil que quien se dedique al trabajo artístico profesional no haya pasado antes por un taller o algún proyecto aficionado, pues esa es la principal cantera del profesional que después se forma en Academias.  Estuve en una compañía de teatro infantil llamada “Los Juglaritos.” que aún existe dirigida por el actor del teatro, el cine y la televisión, Manuel Romero.

Con este grupo hice el protagónico de un gran espectáculo, bien grande, que se estreno en el teatro Mella en aquel entonces, “Almacén de cuentos famosos.” mi personaje era el geniecillo.  Yo creo que parte de la ingenuidad y la inocencia de la infancia te hacen lograr cosas como estas, en mi caso actuar en un teatro tan grade como es el Mella, porque ahora lo pienso mas detenidamente y yo creo que me daría un poco de miedo subirme a ese gran escenario, por eso te digo, cuando eres niño le pierdas el temor a todo y eres mas osado.

HT: Por qué los Títeres en su desarrollo profesional.

YERANDI BASART RAMOS:  Bueno, me dio la curiosidad en tercer año de la ENA de ir mas allá de lo que te enseñan en el programa de estudios, digo tercer año pues es cuando se empieza a profundizar en este tema en la carrera pero de manera muy elemental, y comienza a llamarme la atención cada vez que descubría algo nuevo de los títeres.  Investigue al respecto y di con cosas muy interesantes, me percate de que existía una amplia y rica trayectoria titiritera cubana antes y después del triunfo de la revolución.  Descubrí incluso que existía un grupo en Matanzas llamado “Teatro de las Estaciones” con un trabajo muy especial, y me acerque a ellos para probar el mundo del retablo y todo lo relacionado con los muñecos y el trabajo para niños.

HT: Cuéntenos entonces como llega a esta formación escénica de la que nos habló anteriormente, ya como miembro de la misma.

YERANDI BASART RAMOS:  Le cuento que cuando estaba en tercer año precisamente de mi carrera, me tocó actuar en una obra de Tesis que después pudimos llevar a la ciudad de Camagüey, y a través del autor de esta pieza, Norge Espinosa, quien es el asesor dramático del referido grupo, pudimos coincidir en el evento al que fuimos a presentarnos, y fue allí cuando quede hechizado al ver la puesta “La caja de los juguetes.” Yo me dije, quiero trabajar en “Teatro de las Estaciones.” y se lo hice saber a su director Rubén Darío Salazar.

Yerandi en una presentación de Los Zapaticos de Rosa.

Felizmente al terminar mi carrera me dieron esa posibilidad de entrar hacer mi servicio social y después pude quedarme como un integrante mas.  Me siento muy realizado pues siempre he hecho todo lo que he querido alcanzar en mi vida, y así ha sido.  Como era de la Ciudad Habana, llegue a Matanzas también gracias a otro de los actores del grupo quien me dio la posibilidad de vivir en su casa, y esto en gran medida ayudó a que pudiera trabajar en este lugar para un colectivo que tanto aprecio.

HT: Con “Las Estaciones” tuvo una proyección internacional, cuáles fueron estos eventos y países que visitó junto a Rubén Darío Salazar y su tropa.

YERANDI BASART RAMOS: Este grupo siempre ha sido como una especie de puente entre los titiriteros de Cuba y el mundo, ayuda a establecer vínculos entre los profesionales de la especialidad.  Lo primero que hice con ellos fuera de Cuba fue en el festival de Bengala en Venezuela, con el unipersonal “Historia de Burros.” allí increíblemente confluyeron muchos exponentes de esta especialidad de otros países, incluyendo los mas importantes de Latinoamérica.

Allí represente a través de mi persona a Cuba, viaje solamente con el sonidista, te imaginarás el compromiso que esto demandaba de mi parte pues no tuve a nadie mas conmigo, y a penas iniciándome en la profesión mi director Rubén Darío Salazar me dio este boto de confianza que supe retribuir con el resultado de mi participación.  Lo que mas provechoso me resultó de esta experiencia fue el haber podido ver lo que se hace con el Teatro de Títeres en el mundo, y créeme que me sirvió para percatarme de que los cubanos no estamos demasiado atrás en esta especialidad.

Cuba tiene una plataforma inmensa en esta labor con respecto a otros países donde el teatro esta en un plano inferior de interés y desarrollo.  Después con “Patico Feo” pude asistir a otro festival en Francia, donde estuvimos por varias regiones incluyendo París, esta vez sí viaje con todo el grupo.

HT: Hubo dos puestas en escena que consideramos esenciales en su trabajo como actor, por lo espléndido y poético en su entrega, “Los zapaticos de Rosa” y el unipersonal “Historias de Burro.” Cree que estos espectáculos pudieron haber sido los que permitieron de una forma mas plena, el lucimiento de todo su potencial?

YERANDI BASART RAMOS: Si realmente es cierto.  Sucedió en este orden, primero “Historia de Burros” fue la primera obra que hice con “Las Estaciones.” dándome la oportunidad de mostrarme ante el resto del grupo que ya tenía acumulado 10 años de trabajo y nunca había incorporado otro integrante en ese tiempo de trayectoria, hasta que entro yo.

Yerandi en Historia de Burros.

Este unipersonal es bien fuerte pues demanda cierta entrega, es un trabajo totalmente actoral graficado con figuras donde eres tu solo dándole vida a varios personajes a la vez, sumándole a ello que tienes que interactuar con los niños espectadores haciéndolos parte del espectáculo.  “Historia de Burros” es esa obra que tienes ya en vena, que te ha dado los mejores aplausos y premios, pues obtuve gracias a esta puesta el “Premio Pelusín de Monte.” también la única gran mención que se otorga en el Festival del monólogo, así como diversos lauros que me fueron dados por mi desempeño.

Esta primera experiencia en escena me sirvió enormemente para enfrentarme después a otros espectáculos colectivos como el que mencionas, “Los zapaticos de rosa.” una idea a partir del texto de José Martí que todos conocen, o creen conocer, pues en el proceso de montaje profundizamos en el Martí que igualmente muchos creen conocer.

En “Los zapaticos…” trabajé con la gran soprano cubana Bárbara Llánes que fue otra experiencia inolvidable para mi.  Tengo una anécdota interesante que sucede en el mismo proceso de creación que refería de esta obra, pues fuimos a la fábrica de las populares muñecas cubanas Lilí, porque nos interesaba incluirlas como parte de la puesta.

Al llegar allí descubrimos que ya estaba desmantelada, las muñecas estaban desechas, todas tiradas por pedazos en cajas porque iban a fundirlas, aprovechando el material del que estaban hechas, para fabricar mangueras y venderlas en las tiendas recaudadoras de divisas.

Cuando llegamos al lugar la administradora nos dijo:  “llévenselas todas, porque se van a desaparecer, ahora se compraran las muñecas en china pues son mas económicas que fabricarlas aquí….” en pocas palabras que ya Cuba no haría mas muñecas nacionales.  Se puede decir entonces que nosotros fuimos los últimos que jugamos con muñecas Lilí, y rescatar esa identidad infantil fue muy especial para “Las estaciones.”

HT: En estos momentos ya no integra el referido colectivo matancero, usted ha decidido regresar a su ciudad de raíz, la capital habanera.  Qué inquietudes pudieron llevarle a esta determinación de abandonar “Las Estaciones”?

YERANDI BASART RAMOS:  Bueno en un principio lo que se convirtió en una aventura después devino en un problemas para mi, porque luego de cinco años trabajando en “Las estaciones.” y en una provincia que no era la mía, enfrentaba dificultades con la vivienda, o sea no tenía otra fuente de ingreso que me permitiera una economía para sustentar una renta donde vivir ni mucho menos comprar.

Decidí retornar a La Habana, a mi casa, porque verdaderamente estaba pasando por muchas dificultades en este sentido allá en Matanzas.  Yo soy sincero al decir que nunca me hubiera ido de este colectivo donde me di a conocer y tuve mis mayores satisfacciones profesionales a pesar de tener aun una carrera por delante, teniendo en cuenta mi juventud.

Los Zapaticos de Rosa.

Es interesante, pues el mayor centro de atención cultural casi siempre esta en la capital, y todos vienen hacia acá, mis inicios fueron al revés.  Pero al llegar de nuevo a La Habana pude hacer algunas series en televisión, toque otras puertas que se me abrieron, y una de ellas fue la del maestro Carlos Días, director del reconocido grupo de teatro “El Público” donde me encuentro actualmente, y todo esto gracias a las referencias que ya tenía de lo que pude lograr con el matancero “Teatro de las Estaciones.”

HT:  Acaba de ser papá teniendo ahora 26 años, imagino que eso redoble las responsabilidades.

YERANDI BASART RAMOS: Si, mi bebé se llama Andy y acaba de nacer el pasado 29 de mayo.  Esto claro amerita ahora muchas mas responsabilidades, pero estas se presentan en la manera en que uno las asuma.  Sé que soy muy joven aun, pero yo creo que para tener un hijo no se puede pensar demasiado ya que el mañana es incierto y siempre he querido tener descendencia.  Ahora solo me queda escribir un libro y plantar un árbol.  Es raro porque uno cuando es padre se vuelve mejor persona y la vida le cambia 360 grados.  Incluso hay quien afirma que después de tener un hijo el artista se vuelve mejor en lo que hace, mejor creador, quizás por el nivel de sensibilidad que te proporciona esta condición.

HT:  Como nos definiría la vida de un joven y artista de su tiempo en la Cuba de hoy?  

YERANDI BASART RAMOS: Bastante complicada.  Aparentemente hay mucha apertura para la creación artística, pero cuando uno esta dentro el espacio para un joven creador es bastante reducido.  Será porque tal vez ese joven de otra generación con inquietudes diferentes puede llegar a contradecir,  en el sentido de que las generaciones que le anteceden pudieran no estar acorde con su tiempo.

A veces te encuentras que algunas instituciones están dirigidas por personas que no tienen mucho que ver con lo que se hace, con la Cuba nueva que esta naciendo y la que seguirá creciendo.  Pero pienso que si, que los jóvenes de hoy encontrarán su camino como mismo lo hicieron los de hace 50 años atrás.  Como mismo digo, el que tenga talento, el que tenga voluntad y deseos de hacer, sin dudas que logrará encontrar su espacio para mostrar lo que puede hacer.

HT: Como exponente de la mas nueva generación de teatristas que se interesan por mantener con vida al Títere, que criterio pudiera compartir con nuestros lectores sobre la salud actual de esta especialidad, quizás un poco subestimada en el mundo del teatro.

YERANDI BASART RAMOS: Muy subestimado y la causa pienso es la ignorancia.  De hecho el ser humano siempre va a ignorar aquello que desconoce.  Pero el teatro es una manifestación de por si marginada en gran parte del mundo, y aun mas el títere.  En Cuba hay muchos jóvenes interesados en el títere, yo seguiré diciendo donde quiera que esté que soy un titiritero que actúa y un actor que hace títere, esa es mi esencia y nunca la olvidaré.

Tengo fe en mi generación, tengo fe en una generación que tiene inquietudes de cambiar muchas cosas, de abrir nuevos espacios.  Somos una generación que estamos muy informados.  Creo en que las escuelas puedan tener un programa de teatro para niños mucho mas sólido que les enseñe a respetar mas la asignatura.  Así como también tengo fe en que los niños se acerquen más a la literatura infantil.

HT: Intereses futuros de Yerandi Basart Ramos?

YERANDI BASART RAMOS:  Tengo muchas inquietudes para dirigir, pero antes necesito hacerme de mucha experiencia aun, para poder ser en un futuro un buen director, pues me gusta mucho mover poéticas, mover actores, tener un lenguaje propio, creo que ese será mi camino final.