Editorial Primigenios, un puente literario
Por Pedro Pablo Morejón
HAVANA TIMES – Me declaro inocente da título a un cuaderno compuesto por ocho relatos que narran historias de amor, violencia, sexo, pobreza y frustraciones típicas del hombre en la sociedad cubana.
Un libro que, a pesar de obtener mención en un concurso literario, tal vez nunca se publicaría en Cuba, dada mi condición de autor poco conocido y los evidentes elementos de realismo sucio que se aprecian en sus páginas.
Sin embargo, desde el pasado 12 de octubre, Me declaro inocente salió a la luz bajo el sello de Primigenios, casa editora que constituye un puente literario para todo escritor que, dentro de la Isla, desee ver publicada su obra.
Esta editorial fue creada en el año 2019 por el poeta, narrador y editor, Eduardo René Casanova Ealo, radicado en Miami desde 1999. Según sus palabras, la idea de fundarla nace durante una visita a Cuba.
“Si yo no hubiese ido a rendir tributo a mis muertos que reposan en el cementerio de mi pueblo natal, Quemado de Güines, uno de esos días, no me hubiera encontrado con el director del centro cultural y cine Renacimiento, quien además es albañil y estaba ese día arreglando una tumba. Algo sorprendente en el universo de las cosas y de las causalidades.
“Él fue quien me invitó a asistir a una peña literaria que realizan en el mencionado centro.
“Aquella noche recitamos poemas y platicamos de muchos temas, en especial sobre libros, y alguien me preguntó si era complicado el asunto de publicar. En un arranque de inmodestia me ofrecí a publicar cualquier libro que desearan en mi editorial que ni siquiera existía, ni tenía nombre, ni idea de cómo se podía crear.
“Pero ya en el avión de regreso iba meditando y repasando las imágenes de lo que había visto…A los pocos días ya existía la editorial…”
Hasta el momento, Primigenios ha publicado más de 400 títulos en los géneros de narrativa, poesía, literatura infantil, literatura científica, teatro y testimonio. Su catálogo no solo está integrado por autores cubanos, sino también foráneos.
A pesar de utilizar el sistema de autopublicación de Amazon, la casa editora se caracteriza por un alto nivel en cuanto a calidad y edición, a juzgar por la presencia de obras ya premiadas y de nombres reconocidos en el panorama literario cubano y latinoamericano en general.
Entre las facilidades ofrecidas, se encuentra el hecho de que los servicios de edición, corrección, diseño y publicación, de manera exclusiva, no son cobrados a los escritores cubanos que residan en Cuba, si luego de ser sometidas las obras a la valoración del consejo editorial resultaran aprobadas. Eso sí, deduciéndose el monto de las ventas posteriores.
El resto de los autores recibirá un estimado de cuánto deben pagar, cantidad que debe ser abonada a la entidad antes de la publicación de los libros.
Algo muy favorable para los cubanos de intramuros, si tomamos en cuenta que en los últimos años el mercado del libro ha sufrido cambios perjudiciales, sobre todo, para los autores.
Salvo contadas editoriales que pagan de entrada a escritores famosos, la gran mayoría no se arriesga a la publicación de una obra sin cobrar previamente una suma.
A modo de ejemplo, Me declaro inocente había sido aprobado a finales del 2020 por una editorial española, que me ofreció un contrato de coproducción editorial para su publicación.
En otras palabras: yo debía comprar 100 ejemplares de mi texto y entonces tendría derecho al 90% de las regalías por ventas. Los 100 ejemplares equivalían a poco más de $ 600.00 euros. Una fortuna para mí. “Bye, bye”, les dije.
Pero comprendo que fueron razonables. ¿Cómo invertir miles de euros en un producto de escasa demanda como el libro? Reggaetón, reality show, alcohol, pornografía… sí que resultan ser mercados populares.
Por esas facilidades y por otras razones, Primigenios ha ganado un lugar especial en el corazón de los literatos cubanos, la mayoría de ellos, al decir de su fundador, “con libros engavetados por años. Gente talentosa fruto de un sistema populista cuyas instituciones son insuficientes para cubrir todas las expectativas, en especial a la hora de publicar textos”.
¡Gracias Primigenios por rescatar parte del patrimonio literario de la nación cubana! Aunque esto de escribir y vivir de la literatura sea una fuente inagotable de ilusiones y desencantos.
El que tenga acceso a internet puede autopublicarse, en amazon es gratis, el problema es que los cubanos no pueden tener cuentas en amazon, pero puede hacerla un amigo o familiar en el exterior. En ese caso, el 100% de las ganancias son para el autor, que sabrá la cantidad exacta de libros que ha vendido, sin intermediarios.
Saludos amigo Tito. Lo que dices es cierto. Si yo viviera en otro país quizás me autopublicaba en Amazon. Pero el inconveniente de esto es que siempre es bueno tener quien te edite porque un mismo autor a veces no perscibe sus pequeños errores. También está el hecho de que tendría que aprender a maquetarlo, ilustrarlo. Por otro lado ir bajo el sello de una editorial le da un prestigio al libro que no lo ofrece la autopublicación. Creo que la variante de autopublicarse es buena para un escritor que ya tenga cierta fama y reconocimiento, pero cuando es ese el caso es hasta mejor publicar con una editorial, porque a esos sí les pagan al contado. Gracias por comentar mis escritos.