Dayaniguas, el paraíso de los palaceños
Por Fabiana del Valle
HAVANA TIMES – La Ensenada de Dayaniguas es una zona baja y cenagosa casi abierta al mar, ubicada al sur del actual municipio Los Palacios, entre la desembocadura del río Bacunagua o Santo Domingo y el río San Diego o Caiguanabo, frente al llamado Golfo de Batabanó.
Existe el criterio de que cuando Hernán Cortés zarpó del puerto de Jagua rumbo a poniente desafiando al Gobernador Diego Velázquez penetró río arriba del Caiguanabo donde ocultó sus carabelas. En recuerdo a aquel hecho se le nombró al lugar Hernán Cortés.
Las comunicaciones marítimas hacia tierra firme perfilaron múltiples caminos, el más importante de la zona era desde Dayaniguas hasta San Pedro de las Galeras, hoy San Diego de los Baños. Pero todos iban hacia la ensenada o embarcadero de Cortés.
La posibilidad de contar en el territorio con una salida al mar permitió la interrelación con todas las zonas vecinas. El incremento de las vegas de tabaco, el paulatino cultivo del café, las plantaciones cañeras y la fama de los baños de San Diego hicieron del embarcadero de Dayaniguas un centro importante de exportación e importación.
Hacia 1841 la compañía naviera del sur Bustamante y Cagigal comenzó a realizar frecuentes viajes de Batabanó a Dayaniguas facilitando intercambios de mercaderías entre las zonas.
Se construyó un muelle de trescientas varas en la propia ensenada, grandes almacenes además de otros en el embarcadero de Cortés justo en el margen del río Caiguanabo para facilitar el manejo de la mercancía.
Los famosos baños de San Diego eran visitados por ilustres familias habaneras, extranjeros y viajeros de toda índole. Todo cuanto se movía en la zona proveniente de cualquier lugar de la Isla o el extranjero era transportado por Dayaniguas.
A inicios de 1920 fue transformándose en lugar veraniego frecuentado por los palaceños. Las familias pudientes poco a poco construyeron allí sus residencias, los pobres, humildes casas de madera y guano. Era tal la afluencia que en los años 1957 y 1958 existía un ómnibus desde Paso Real de San Diego hasta el lugar.
A partir de 1959 la concurrencia de personas fue en aumento. Con el paso de los años surgieron varios proyectos estatales para mejorar el sitio como espacio vacacional, pero al final muy pocos se llevaron a término.
A casi un año del último ciclón que arrasó con la mayor parte de las construcciones, la cafetería, el puesto médico y los muelles de madera siguen siendo escombros, mientras las residencias particulares cobran vida. Esto demuestra el escaso interés de las autoridades pertinentes.
Aunque el camino a la playa es cada vez más incómodo y el transporte escaso, las personas la continúan visitando cada verano. El amor de los palaceños por este lugar es quien lo mantiene activo y lo hace renacer cada vez que la furia de la naturaleza reclama su espacio.
Siempre fue uno de los lugares preferidos de mi padre por eso la recuerdo con mucho cariño
En mi paya hermosa pq para la familia de los cabezones no hay otra aun pudiendo año tras año nos vamos de vacaciones ya sea julio completo sin salir o agosto pq el otro tiempo del año todas las festividades de la familia la hacemos ahí
Ahí ha crecido las tres generaciones de la familia .
Julio o julio el cabezón mi papá y Juana mi mamá
Para muchos ese es un verdadero paraíso lastima q las autoridades de este municipio apezar de q muchos también crecieron ahí abajo hoy no les interesan y nos la quieren arrebatar
Hay q seguir luchando por nuestra playa y publicar más historias para ver quien o quienes comen conciencia y se preocupan más por ella
Creo que es muy pertinente añadir que en la actualidad y muy apresar del empeño gubernamental por seguir acrecentando la crisis alimentaria como parte de su política de sumisión, constituye una importante fuente de paliativos alimenticios y generador de empleo , puesto que la fauna marina es muy abundante y pudiera alcanzar niveles muy superiores en las manos adecuadas con las debidas regulaciones de veda y control de especies .
Soy palaceño,más exactamente de paso quemado ,bella mi infancia en ese lugar todos los años íbamos mis padres y mis amigos ,gratis recuerdos ,varias veces los huracanes han destruido ese bello lugar ,y nuestros hermanos la han vuelto a levantar,hace años q la despreocupación estatal está presente,lastima ,pero recuerdo q éramos Miles en esa hermosa y pequeña Ensenada,en vacaciones y los fines de semana ,y si ,habían guaguas q nos llevaban ,camiones ,tractores ,hasta en bicicleta íbamos esos 23 km parte asfalto y parte terraplén ,q nostalgia ,un saludo
Mi playita preferida mi fanquito, ahi creci, la visitaba casi todos los fines de semanas y las vacaciones casi completas , aunque tubiera la posibilidad de visitar otras playas esa era mi preferida mi segunda casa el lugar preferido de mi padre ” Pipo Mojarra”
Aunque ya no estoy alla pero siempre llevo ese recuerdo en mi corazon y sufro mucho todo la destruccion de la naturaleza y de la poca atencion que ha tenido nuestra playita por parte del gobierno . Es una lastima porque es el unico entretenimiento de muchos palaceños . Siempre estare dispuesta a ayudar para que vuelva a ser el paraiso de nuestra gente palaceña !!!!