Nicaragüenses en Costa Rica marcharon en repudio a la “farsa” electoral

Centenares se manifestaron en las calles de San José para denunciar la votación que se lleva a cabo en Nicaragua y para demandar elecciones libres

Por Cindy Regidor (Confidencial)

HAVANA TIMES – “Nos exiliarán, pero no nos callarán”, gritaron al unísono, la mañana de este domingo 7 de noviembre, nicaragüenses exiliados que marcharon por el centro de San José, en Costa Rica, destino de miles de nicaragüenses migrantes históricos y refugiados que llegaron después del estallido de la crisis sociopolítica en Nicaragua en 2018.

Banderas azul y blanco ondearon en la capital costarricense, donde centenares de personas se reunieron, en los alrededores del parque Braulio Carrillo conocido como parque La Merced. De allí, partieron para marchar en rechazo a la votación sin garantías que ocurre este domingo en Nicaragua, y para gritar consignas de libertad y en contra del régimen Ortega Murillo.

La manifestación fue parte de la Gran Marcha Mundial, una jornada de protestas convocadas por quienes califican de “farsa” las votaciones en Nicaragua ya que se dan sin competencia política y bajo el control absoluto del régimen de Ortega.

Tras iniciar la actividad, la marcha se dividió en dos bloques, uno que salió primero y se dirigió hacia la Embajada de Nicaragua en el Barrio La California; y el segundo, que culminó en la Plaza de la Democracia.

“Lo de hoy es una farsa porque metieron a la cárcel a todos los candidatos a presidente. Que se repitan las elecciones cuando liberen a todos los presos políticos y que nos permitan votar desde el exterior”, demandó Eliécer Lumbí, nicaragüense en Costa Rica que asistió a la actividad, en referencia a los siete aspirantes presidenciales que el régimen Ortega Murillo detuvo desde mayo pasado, como parte de 39 nuevos presos que siguen en prisión por motivos políticos, incluyendo a líderes cívicos, periodistas, empresarios, defensores de derechos humanos y exdiplomáticos.

“Estamos diciéndole al pueblo de Nicaragua : ‘quédense en su casa, que nosotros, desde acá, hacemos la bulla’. Esta es una demostración para que este proceso electoral y este régimen sean declarados ilegítimos”, expresó Ana Quirós, de la Articulación de Movimientos Feministas de Nicaragua.

En la marcha participaron el Movimiento Campesino, Movimiento Anti Canal, ciudadanos de la Costa Caribe de Nicaragua, estudiantes universitarios exiliados, agrupaciones feministas, defensores de derechos humanos, organizaciones humanitarias que asisten a refugiados nicaragüenses, así como también algunos políticos y ciudadanos costarricenses que acompañaron a los asistentes como gesto de solidaridad con las víctimas de la represión estatal nicaragüense.

Participantes de todas las edades y desde diferentes zonas de Costa Rica atendieron la convocatoria. “Hemos venido a manifestarnos para que el mundo entero sepa que en Nicaragua esas no son elecciones, son votaciones. Les pedimos que no reconozcan esas elecciones, en Nicaragua se violan los derechos humanos. Ayer hubo muchos campesinos presos (en Nicaragua), solo porque no quieren legitimar (la votación). Aquí estamos con dificultades, pero estamos manifestándonos”, aseguró Francisca Ramírez, líder campesina, quien llegó desde Upala, Alajuela, junto con decenas de otros campesinos nicaragüenses que conforman un campamento en el que viven desde que se exiliaron en 2018 por la persecución política del régimen.

Las Madres de Abril también participaron de la demostración este domingo. “Las madres exigimos justicia por la sangre derramada de nuestros hijos. No es posible que en esas boletas electorales estén las caras de los asesinos de nuestros hijos. Repudiamos contundentemente ese circo electoral que se está presenciando en Nicaragua el día de hoy”, comentó Yadira Córdoba, madre de Orlando Córdoba, un adolescente de 15 años y una de las más de 300 víctimas letales de la represión de Ortega en 2018 durante las masivas manifestaciones en su contra.

“Demandamos libertad de los presos políticos, respeto a los derechos humanos y que la dictadura no continúe violentando la libertades fundamentales de la población nicaragüense”, exclamó Braulio Abarca, defensor de derechos humanos exiliado en Costa Rica y miembro del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más.

La marcha concluyó a mediodía. Quienes se quedaron en la Plaza de la Democracia asistieron después a la Feria Pinolera, ubicada a un costado de la plaza, donde pudieron degustar comida típica y disfrutar de bailes y presentaciones artísticas de artistas nicaragüenses.

Con colaboración de Katherine Estrada.

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