HAVANA TIMES – La casa materna que el Ministerio de Salud (Minsa) inauguró este 23 de febrero en el local confiscado a CONFIDENCIAL en diciembre de 2018, utiliza muebles y equipos que quedaron en las oficinas tras el asalto y ocupación manu militari a los medios de comunicación independientes CONFIDENCIAL, Esta Semana, Esta Noche, Revista Niú, y la empresa consultora Cabal.
El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ejecuta así el último acto de confiscación a la redacción de CONFIDENCIAL, en complicidad con el Ministerio de Salud, que según Murillo cuenta con el “invaluable apoyo” del Gobierno de Taiwán, que hasta ahora no se ha pronunciado al respecto.
En las últimas tres semanas, se advirtió en torno al edificio confiscado una actividad frenética de trabajadores estatales, fuertemente custodiados por policías armados. También la mañana del domingo 21 de febrero, llegó al edificio el sancionado presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras, para inspeccionar las labores de la supuesta “casa materna” en el local.
Este lunes, el Ministerio de Salud instaló tres toldos y equipo de sonido afuera del edificio confiscado, y hoy martes se colocaron sillas para la inauguración. Fotografías difundidas por medios de la propaganda oficial muestran las condiciones de la supuesta casa materna, en las que se observan muebles y equipos de las oficinas, incluyendo una mesa de vidrio del estudio de grabación del programa Esta Semana, que se había rediseñado dos semanas antes del asalto.