La prensa extranjera visita prisiones en Cuba

Fernando Ravsberg*

Cuba permite a la prensa extranjera visitar prisiones y conversar con los presos. Foto: Raquel Pérez
Cuba permite a la prensa extranjera visitar prisiones y conversar con los presos. Foto: Raquel Pérez

HAVANA TIMES — Por primera vez en una década, el gobierno cubano autorizó el acceso de la prensa extranjera a varias prisiones, dos autobuses repletos de periodistas visitamos 4 centros penitenciarios.

Las autoridades pretenden mostrar al mundo los resultados de un sistema de disminución de rigurosidad, en el que la mitad de los presos gozan de un régimen abierto que les permite trabajar fuera y visitar a sus familias.

Hay en Cuba 57 mil reclusos divididos en 5 prisiones de máxima seguridad, 40 normales y 155 centros abiertos. Uno de estos últimos es La Lima, cuyo director, el mayor Jorge Fonseca, dijo a Público que hoy la mitad de los reclusos se benefician de la menor rigurosidad pero el proyecto a nivel nacional es llegar a tener en los próximo años “al 70% de los internos en régimen abierto”.

En el Combinado del Este se encuentran los presos más peligrosos de La Habana, a muchos de ellos ni siquiera se les permite trabajar. Este penal tiene la tasa de participación laboral más baja del país, solo el 27 % mientras la media nacional supera el 40 %.

Sin embargo, también allí existe un sistema de premiación a la buena conducta y a la integración en los programas de reinserción que va abriendo puertas, al trabajo, al estudio, al aprendizaje de un oficio e incluso a la reducción de condena y a la posibilidad de llegar a ser trasladado a un régimen más abierto.

Las prisiones cuentan con escuelas de oficios para readaptar al preso socialmente." Foto: Raquel Pérez
Las prisiones cuentan con escuelas de oficios para readaptar al preso socialmente.” Foto: Raquel Pérez

En la prisión hay escuelas para aprender oficios y se puede trabajar en un desguace de automóviles chocados. El ingeniero Rafael Farsa nos explica que al penal “entran unos 25 carros cada semana, a los cuales les recuperamos piezas por un valor de U$D 1 millón al año”.

Los presos ganan un salario de alrededor de U$D 20 mensuales pero hay incentivos más fuertes para trabajar, les aumentan las visitas conyugales, se reduce hasta en 4 meses por año la condena y avanzan hacia formas más abiertas de reclusión.

Al parecer este sistema de estímulos está reduciendo el nivel de violencia entre los reclusos. “Esto nunca va a ser un buen ambiente pero violencia no hay”, nos confirma Daniel Acuña, un recluso de 25 años, acusado de robo con fuerza, al que encontramos jugando beisbol. Nos aclara que “tampoco hay violencia sexual”. En la actualidad habría menos de 6 heridos por arma blanca al año, según explica el Jefe de sanidad penitenciaria, Dr. Mariano Izquierdo.

Añade que la incidencia del VIH SIDA es menor porque los portadores están en un penal especial, evitando así la propagación del virus. Además se hacen pruebas anuales a todos los reclusos y se les proporciona el tratamiento de antiretrovirales a los 0 positivos.

“A mí me dan todo lo que necesito para mi enfermedad, ahora me están estudiando para operarme de una mama”, nos dice en el hospital Lianes Lamonth, quien fue diagnosticada como portadora al entrar a prisión y trasladada a un centro especial de San José, en las afueras de La Habana.

“Aquí se violan todos los derechos de los presos, a mí que me manden para la base militar de Guantánamo, ahí donde están “los malos” pero no se tortura a nadie”. Foto: Raquel Pérez
“Aquí se violan todos los derechos de los presos, a mí que me manden para la base militar de Guantánamo, ahí donde están “los malos” pero no se tortura a nadie”. Foto: Raquel Pérez

Los reclusos no se quejan tanto de las condiciones de vida del Combinado pero varios de los que entrevistamos protestan por las largas esperas para el juicio y la dureza de las condenas. Las leyes de Cuba no ponen un tiempo límite para acusar formalmente a una persona. En la sala de espera Delia Enríquez cuenta que su esposo lleva ya 2 años preso sin condena, “lo acusan de receptación pero sigue a la espera de que el instructor presente cargos”.

La misma visita no estuvo exenta de protestas, uno de los reclusos gritó que “aquí se violan todos los derechos de los presos, a mí que me manden para la base militar de Guantánamo, ahí donde están “los malos” pero no se tortura a nadie”.

Mientras que el colombiano Rafael Bustamente condenado por tráfico internacional de drogas y el italiano Simone Fini, acusado del asesinato de una adolecente cubana, gritaban desde sus celdas que eran inocentes y estaban “secuestrados por la dictadura”.

Los centros penitenciarios abiertos

Durante los últimos años han aumentado los centros penitenciarios abiertos de mínima seguridad, a los que se llega por méritos logrados a su paso por otros penales o porque el delito cometido es leve y el recluso no representa un peligro para la sociedad, explicó el Mayor Jorge Fonseca, jefe del centro de reclusión abierta de La Lima.

En ellos se concentran por ejemplo los reos por delitos económicos o de corrupción, tan comunes en estos días por la campaña de limpieza que impulsa el gobierno. En La Lima hay más de un centenar de presos que cumplen sentencia por delitos económicos. Jesús Quintero, de 60 años, nos confiesa que fue condenado por “por malversar U$D 250 mil en una firma extranjera”.

Dos presos extranjeros aseguraron que estaban secuestrados por “la dictadura”. Foto: Raquel Pérez
Dos presos extranjeros aseguraron que estaban secuestrados por “la dictadura”. Foto: Raquel Pérez

En estos centros el trabajo es externo, fundamentalmente laboran en brigadas de construcción de viviendas y en limpieza de la ciudad. Van y vienen del trabajo sin escolta policial, la seguridad del penal es mínima y los presos pueden ir a visitar a su familia una vez al mes durante 72 horas pero si se fugan vuelven al penal cerrado.

Los recursos deben integrarse a los programas de trabajo y estudio con el fin de que al terminar la condena tengan un oficio con el que ganarse la vida. De todas formas todos los que son liberados salen con un puesto de trabajo en una empresa estatal, gracias a un acuerdo a nivel nacional. Además existe un “grupo multidisciplinario” que coordina acciones con la familia para que esta influya sobre el interno.

En 2007, cuando Raúl Castro asumió la presidencia, la política carcelaria empezó a cambiar. El gobierno impulsó la creación de decenas de estos centros penitenciarios abiertos en todo el país para trasladar a los presos no peligrosos a condiciones de menos rigor.

En 2010 se ordenó la liberación de 250 prisioneros políticos, mediante un acuerdo con el gobierno español y la Iglesia Católica. Un año después se amnistiaron a 3000 presos comunes y se anunció que cada año se repetiría la acción para aquellas personas que ya no representan un peligro de cara a la sociedad.

Y finalmente se le perdonó la vida a todos los condenados a penas de muerte que estaban a la espera de ejecución.
—–
(*) Leer el blog de Fernando Ravsberg.

8 thoughts on “La prensa extranjera visita prisiones en Cuba

  • Wow !
    ya lo adivinaba y no me equivoque en el articulo anterior cuando dije que a Fernando lo usarian para dar propaganda tambien en el carnaval! :-)

  • Donde dice “Los recursos deben integrarse” deberia decir “Los reclusos deben integrarse”.

  • Los cambios que senala Fernando me parecen positivos pero creo que es necesario que la prensa y organizaciones internacionales puedan presentarse a cualquiera de las carceles sin previo aviso.

  • Es una pena que Fernando no haya podido hablar con Angel Santiesteban quien fue recluido en un calabozo de La Lima durante la visita de los periodistas para que no molestara a la prensa con el pedido de revisión de su caso.

  • Fernando:
    Tienes un eror garrafal en cuanto al VIH/sida.
    Escribes:
    “…se les proporciona el tratamiento de antiretrovirales a los 0 positivos.”
    y se escribe “seropositivos” pues se trata de los que tienen el virus en el suero de su sangre, por eso son “seropositivos”
    Si pones “0 positivo” estas diciendo que NO es positivo.

  • Este reportaje es una SUPER MENTIRA. Da pena que tanta gente educada le crea los paquetes estos al Rasverg. Haganse el favor y preguntenle a algun conocido que ha estado preso en Cuba sobre las condiciones que enfrentaron alla adentro. Celdas hacinadas, 24 personas en 8 literas de 3, una letrina asquerosa por celda, oficiales corruptos y abusadores, sin agua, comida asquerosa y magra, ropa de tela de muerto, etc. Ya habra quien me salga al paso con los “beneficios de la Roboilusion”, pero hay que estar ahi para saber lo que es pan de piquito.

  • Cada vez me convenzo mas de que Rasverg es el periodista internacional del G2. Y no lo digo porque piense diferente a el sino por la forma en que enfoca sus escritos. Tan solo hay que ser cubano y haber leido al menos una vez el Granma para darse cuenta. Pero en fin su “misión” si estoy en lo cierto no es con los lectores de este sitio sino con el resto del mundo que no conoce al gobierno cubano y su modus operandi.

  • Es muy importante el testimonio de Angel Santiesteban sobre el estado calamitoso en que vive la población penal cubana.
    El gobierno cubano ha preparado una comparsa para presentar un informe totalmente positivo de su gestión de los derechos humanos en CUBA, en la próxima reunión de la ONU, el primero de mayo. Toda una manipulación de la información porque permite visitar a la prensa extranjera a cuatro prisiones solamente, y saca por el fondo a los prisioneros como Angel para que no pase la información a la prensa extranjera acreditada.
    Lamentablemente periodistas como Ravsberg, dan otra imagen edulcorada de los derechos humanos en las cárceles cubanas y no toca las bandas paramilitares de los propios reclusos organizadas por los militares cubanos que dirigen las prisiones y que impulsan las golpizas ylas torturas físicas y psicológicas contra los demás presos.Tampoco habla Ravsberg, de los suicidios inducidos, las torturas físicas y las torturas psicológicas que enfrenta la población penal cubana.Como periodista acreditado en el país no ha entrevistado a Daniel Ferrer, a Rodolfo Barthelemy Cobas a Israel Poveda Silva, a Jorge Luis García Antunez, todos expresos políticos, tampoco a Angel Santiesteban. En fin que como periodista hace doblemente mal su trabajo: no entrevista a la verdadera población penal y expenal política y común y escribe sobre el tema contentándose con la visita “preparada” por el gobierno cubano para la prensa extranjera acreditada en el país. Muy lamentable su posición.

Comentarios cerrados.