Cuba sueña con final de Serie Mundial de Boxeo: «Es nuestra meta»

Por Sergio Carrillo

Alberto Puig
Alberto Puig

HAVANA TIMES (dpa) — El boxeo cubano, buque insignia del deporte en la isla, incursiona por primera vez en la Serie Mundial de Boxeo (WSB) con el fin de recuperar el prestigio perdido y afianzar a sus púgiles de cara a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.

«Vamos a hacer todo lo necesario para ver si nos encontramos en la final de la Serie Mundial», afirmó en una entrevista con la agencia dpa Alberto Puig, presidente de la Federación Cubana de Boxeo.

Cuba, potencia mundial en el deporte de los puños, hace su arribo a una competencia del pugilismo rentado tras más de medio siglo de veto al deporte profesional. En agosto participó en una serie de combates de exhibición con victoria de 7-3 en la capital mexicana.

«Nuestro equipo cubano está experimentando en este nuevo boxeo», agregó el dirigente deportivo en el marco del debut de su país en la cuarta Serie Mundial de Boxeo, en la que Domadores de Cuba se enfrenta Guereros de México en Ciudad de México.

La AIBA (Asociación Internacional de Boxeo Aficionado) anunció en abril pasado el regreso de Cuba al boxeo rentado tras varias décadas de veto al deporte profesional.

«Hemos visto mucha seriedad por parte de la organización WSB» apuntó Puig.

El dirigente destacó que en las nuevas Series Mundiales de Boxeo hay un sistema de competencia que se preocupa más por la protección del púgil, como es el uso de guantes de mayor peso. «Quizá haya menos noqueados y menos heridos, pero la técnica va a motivar que la gente vea este tipo de boxeo».

En este formato, los equipos de 12 naciones se miden en series a cinco combates a visita recíproca, con un sistema de puntuación similar al usado en peleas profesionales.

La Serie Mundial incluye la participación de 12 países. El Grupo A lo integran Argelia, Argentina, Alemania, Italia, Ucrania y Estados Unidos. El Grupo B lo conforman Azerbayán, Cuba, Polonia, Kazajstán, México y Rusia.

Los cuatro mejores de cada uno de las dos llaves avanzarán a los cuartos de final.

Las peleas sin el clásico protector de cabeza ya se oficializaron en junio pasado en Cuba durante la final del Torneo Nacional de Boxeo por Equipos.

En la entrevista, Puig destaca que en la WSB se usan todas las reglas del boxeo olímpico o abierto. Las únicas diferencias son que se pelea a cinco asaltos, por equipos, sin camiseta y sin protección en la cabeza.

Puig asimismo destacó la importancia de participar en el «boxeo abierto», como él llama al semiprofesionalismo, porque el «buque insignia» del deporte cubano había perdido fuerza en los últimos años y ahora puede recuperar su prestigio.

«Esto (el poderío) se había perdido un poco y se rescató en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Cuba logró cuatro medallas y dos fueron del boxeo, es decir que logramos el 50 por ciento de preseas que ganamos. En Río de Janeiro 2016 estaremos trabajando con mucha seriedad para hacer un mejor papel», señaló.

Puig descartó además el ingreso de Cuba al boxeo profesional: «No nos ha motivado esa idea. Hemos pensando con mucha motivación incorporarnos a la Serie Mundial, ya estamos en ella y esta es nuestra meta ahora. Después pensaremos en otra cosa».

En el equipo cubano destaca el ganador de la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 y del bronce en Londres 2012, Yasniel Toledo, quien compite en la división de los 64 kilos, y el campeón olímpico en Londres 2012 Robeisy Ramírez en 56 kilos.

En el torneo, los equipos se miden en series de cinco peleas, la puntuación será similar a la del profesionalismo y los púgiles cobrarán por pelear.

Cuba eliminó en 1961 el deporte rentado en la isla, medida que con el paso de los años fortaleció las competencias de aficionados hasta convertir a Cuba en una potencia olímpica en casi todos los deportes, incluyendo el pugilismo. La delegación cubana terminó entre las diez primeras nacionales del medallero en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92.

En contraste, muchos boxeadores y beisbolistas escaparon del país para competir de manera profesional en Europa o Estados Unidos, donde se convirtieron en muchos casos en grandes estrellas bien pagadas.