El Parque de Kholy
Fotorreportaje por Irina Pino
HAVANA TIMES – Cuando se construyó el barrio de Kholy, en el siglo pasado, se pensó en integrar la arquitectura al entorno, pues es un sitio alto, donde subyuga la vegetación. Es aledaño al Rio Almendares, al Bosque de La Habana, y pertenece al Municipio Marianao.
Allí se edificaron mansiones para gente de mucha plata. Amplias residencias con garajes para autos y demás comodidades. Algunas tienen hasta piscinas. Cerca, está el Hotel Kholy, y una clínica privada.
Parte de esta zona, es custodiada las 24 horas. Desde que esos ricos se marcharon del país, después de 1959, a otras personas le fueron entregadas sus casas, aunque no a gente de a pie. Eso todo el mundo lo sabe.
Existe un parque cercano, que se nombra Kholy, igualmente. Ocupa una extensión enorme, empieza en la Avenida 41 y comunica con la calle de atrás. Perviven los árboles y una vegetación que se incrusta a la piedra. Se pueden apreciar algunas viviendas en un costado del parque. Me imagino que sus ocupantes, desde allá arriba, observen a los visitantes, y hasta escuchen sus conversaciones.
Es curioso, además, por sus múltiples escaleras y diferentes niveles. En un espacio lateral, tiene una plazoleta, no sé si era tal vez un espejo de agua, pero está bastante sucia.
Un pequeño parque infantil se inserta en ese lugar. Lo rodea una hilera de ladrillos, y se entra por una callecita medio escondida. El otro día, mientras tomaba fotos, entré y vi los aparatos para los niños. Por supuesto que me monté en uno de los columpios; me encantó recordar cuanto disfrutaba en mi niñez balanceándome con las piernas estiradas y el viento dándome en el rostro.
Les confieso que no luce bonito, se nota el abandono. La mayoría de los aparatos carecen de pintura, otros están medio oxidados. Ni siquiera hay gravilla en el suelo. Así que, cuando llueve, impera el fango. Dentro, también hay un puesto de venta en desuso.
Es una verdadera lástima, que un sitio como este no tenga la vida que se merece, donde los niños pudieran tener opciones para disfrutar con amigos y sus padres.
Todo el parque está como enterrado, es muy silencioso, aislado. Duele verlo y no poder hacer nada. Solo pienso en las posibilidades que aún no ha perdido, en su apagada belleza.
Saludos, casi toda el área pertenece a Gaesa y lo controla la inmobiliaria de este grupo. El hotel es de Gaviota y la clínica es para dirigentes del gobierno, no es pública. Está el edificio de los generales.
Muy bueno el reportaje. Irina. De más está decir que las fotos tienen el toque de la inmediatez. Cuando comencé a verlas me remitieron enseguida, mentalmente, a pasajes del texto.
Ese parque, aunque no es de los que más me gustan, tiene su encanto y he pasado por allí muchas veces.