Congregation: El metal es el partido musical opositor

Por Ernesto González

HAVANA TIMES – Permanecer en Cuba veinticuatro años haciendo rock, creo que es algo casi heroico, pero si es haciendo metal, es más heroico todavía. Congregation es un grupo metalero cubano, capitalino específicamente, que recién celebra sus veinticuatro años de creado. Con ellos conversamos al terminar un ensayo del concierto que darán precisamente para festejar todo este tiempo en la escena musical cubana.

Ustedes son metaleros. ¿Qué caracteriza al metal como género rockero?

Gisselle Hernández Rivas (productora del grupo): Hay muchos tipos de rock, así como hay muchos tipos de metal también… la diferencia más significativa está en la rapidez, el metal tiende a ser más rápido, más pesado musicalmente.

¿Cuáles son los inicios del grupo?

Ariel Bustamante (director y baterista): El grupo surge a partir de la banda Trance. En el año 1999 Lázaro Castro, el vocalista de Creation y yo fundamos Congregation. El primer concierto fue en el “Patio de Maria”, que en aquel entonces era uno de los lugares por excelencia para el rock en La Habana, en marzo del 2000. Poco tiempo después este centro cultural cerró.

Meses más tarde, sigue contando Ariel, grabamos nuestro primer disco, en el estudio de Ivan Leyva, por cierto muy buen estudio, gracias a Vicente y Santiago Feliú, que fueron los que hicieron la producción. Posteriormente hicimos un disco en Radio Progreso, que lamentablemente no quedó bien y  más recientemente grabamos “Congregation Congregation”, una recopilación que nos pidieron de Miami con temas icónicos de la banda.

Sobre este último disco Leo nos comenta que el público mismo pidió que grabaran temas antiguos con las tecnologías actuales y mejores recursos.

¿Cómo es el escenario del rock actual en Cuba?

Ariel (baterista y director) y Leandro Chamizo (Leo) (vocalista): La Agencia cubana del rock, un magnifico lugar que no es ni blanco ni negro, tiene muchísimos matices, que pese a criterios negativos, dio la posibilidad de promover y dar un espacio a lo que al público rockero y metalero cubano le gusta. Lamentablemente en este momento está agonizando, ahora hay una directiva nueva que apoya poco, no están haciendo nada, todos son trabas y trabas para trabajar y cuando logras un concierto, un disco o cualquier cosa a base de tu esfuerzo, quieren llevarse todos los méritos. Y tenemos bandas  espectaculares y paradigmáticas como Zeus, Hipnosis, y otras como Death Point que llenaban el Maxim y lo cerraban por capacidad.

Hoy en día no se puede vivir del rock en Cuba, la mayoría de las bandas de rock en Cuba lo que están haciendo son Covers, porque tienen que vivir, son músicos excelentes ante los cuales me quito el sombrero, pero tienen que comer. Lo que hacemos lo hacemos por amor al arte, a la música, al metal, pero todos tenemos trabajos alternativos para poder vivir.

Cambiando de tema, ustedes hacen metal underground, coméntame sobre lo que hace Congregation desde el punto de vista musical.

Leo (vocalista):  Nosotros tenemos una propuesta musical que combina diferentes estilos, tanto en lo musical, como en nuestras letras. No somos underground puro.  Congregation ha evolucionado de una manera increíble gracias al talento de Ariel. Yo cantaba hard rock, soul, country, y Ariel me dijo ¿por qué no cantas con nosotros? Eso fue hace 14 años… yo voy a un ensayo totalmente escéptico y no hubo un solo tema que armónica y musicalmente no me llamara la atención, ¿cómo es posible que a partir de esa agresividad que transmite el metal, pudiera encontrar tanta ternura y tanto sentimiento? Desde ese día me enamoré del death metal y de Congregation, tenía 21 años, estudiaba en la universidad y ahora con 35 años no quiero estar en otro lugar.

Congregation, sin abandonar su esencia, ha mezclado timbres, ritmos, tendencias, nos hemos modernizados, hemos usados otros acordes con escalas folclóricas de diferentes culturas.

¿Por qué escogen el rock para hacer música?

Ariel (director y baterista): Con 12 o 13 años, empecé a oír Beetles y Rollings Stone…ya tú sabes, empecé a “perseguir” los grupos cubanos en los conciertos de la Avenida del puerto, anfiteatro de Alamar, el Patio de María, que en los  años 80 eran los espacios por excelencia para el rock. 

Gisselle (productora del grupo): Empecé a oír rock en la secundaria, porque cerca de mi casa, en el Cerro, ensayaba un grupo, que no recuerdo su nombre, era algo que me encantaba… yo salía de la  escuela corriendo y me sentaba a oír el grupo ensayar…también de adolescente asistía a los ensayos de la banda punk Garage H en la casa de la cultura de Centro Habana… desde ese entonces soy rockera. 

Lázaro Hernández (Lachy)  (Bajista del grupo): Yo hace cuatro años me uní a la banda, venia de Combat noise otro grupo de rock, y aquí estoy haciendo metal. Un día intenté en grupo de salsa  a ver si me ganaba unos kilitos pero que va, no pude, lo mío es el metal.

Jorge García (El Indio)  (Guitarrista y productor musical):  Yo soy fundador del grupo, he tenido la dicha de tocar con todos los que han pasado por esta banda. Tengo un estudio de grabación, que es dedicado solamente al rock y al metal, cuando las bandas van a grabar les hago los arreglos, les doy sugerencias y esas cosas…el otro día me cayeron unos reguetoneros diciéndome que me iban a pagar bien y yo les dije que no, no hago mix al estilo tradicional, yo soy muy fiel al metal.

¿Es el rock en Cuba un género de rebeldía?

Ariel (baterista y director): Yo no diría de rebeldía, yo diría contestatario, a nivel global no, pero en Cuba siempre ha sido un género contestatario.

Leo (vocalista): El metal como género musical, es el partido musical opositor, que pasa que el metal sigue reglas, pero tú no puedes discriminarme, tú no puedes ir contra mis derechos. El metal no busca la anarquía ni la libertad podrida. El metalero responde por las personas que no son las más privilegiadas, que son discriminadas. El metal desde que nace se convierte en el encargado de decir todo lo que no nos gustaba, pero no para criticar sino para mejorar como sociedad y como país. Congregation no critica al gobierno, criticamos las cosas que están mal en el país.

¿El ser el partido musical opositor hace que el mercado los discrimine?

Leo (vocalista): Por supuesto, que nos discrimina, nadie quiere oír lo que está mal, todo el mundo quiere oír lo que está bien. El mercado nos idiotiza e impone códigos de consumo que se alejan de lo contestatario, de lo cuestionador.

¿Cuál es la función y la importancia de un buen productor musical para el desarrollo de la banda?

Leo (vocalista): El productor es el eje principal de la banda, la Agencia Cubana del Rock, es tu representante a nivel nacional, pero ella te dice “tú te buscas lo tuyo y yo te digo si puedes o no” en cuanto a conciertos, giras, etc. Hace años que no podemos ir a tocar a una provincia, porque la Agencia te dice que no. El productor es el eje de lo que llamamos la tierra musical, se encarga de todo, de la logística, de la documentación. Congregation tuvo un gran productor que fue Alexander Piloto, una mente brillante para la producción, ahora tenemos a Giselle, que es muy buena también y que está muy comprometida e involucrada en el trabajo, ella se encarga de que todo funcione.

Gisselle (productora): Yo no tengo mucha experiencia, pero he visto el trabajo que pasa el rockero y el metalero para subsistir a través del tiempo, siempre hemos sido muy subvalorados, nadie nos ha apoyado ni nos apoya. A esta gente que está todavía arriba del escenario hay que ponerles una medalla en medio del pecho.

¿Cuáles son los planes inmediatos que tiene la banda?

Gisselle (productora):  En este momento fuimos invitados a las romerías de mayo y seguimos buscando espacios, más allá del Maxim Rock, como el bar Doble A y otros espacios privados que nos puedan abrir las puertas. Otra cosa que tenemos en planes es grabar un video clip con uno de los temas propios de la banda, y continuar en la promoción del disco…en fin seguir dando guerra.

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