La dictadura cubana se maquilla multicolor
Por Luis Rondon Paz
HAVANA TIMES – Acabo de leer las noticias sobre el nuevo código de familia en Cuba y lo que me viene a la mente es la siguiente pregunta:
¿En serio se creen que ya de un día para otro la mentalidad retrógrada de esa sociedad apadrinada por el poder pondrá en la práctica lo que con bombos y platillos se anunció hoy en medios de prensa oficial e internacional?
Quien se crea eso es muy ingenuo o está simulando para sacar mejor provecho de esta pequeña limosna que el régimen ha concedido a un sector que, quiéralo o no, hoy con la podredumbre que vive ese país, es un área que genera ingreso contable y rápido a las arcas del engendro castrista.
Con el permiso de quienes en su momento fueron mis compañeros y compañeras de lucha por los derechos de las minorías sexuales y sus libertades individuales aquí dejaré las razones de por qué, en mi opinión, esta vez se ganó algo por lo que nunca se debió luchar en primer lugar.
Creo que dada las circunstancias especiales en que se encuentra el país; miseria de alimentos extrema, de medicinas, disminución drástica de las exportaciones, represión extrema hacia quienes opinan diferente del discurso oficial; el régimen juega esta pieza en su tablero en favor de los colectivos LGBTQ+ para una vez más desviar la atención del mundo y de quienes están dentro del país. De cierta manera es más de lo mismo, ¿se recuerdan de la aprobación de la pequeña empresa y el trabajo por cuenta propia? Es un negocio más, una jugada bien pensada.
¿Creen que el PCC y su consejo de Ministros pierden algo en aprobar el código?
Claro que no!
Por el contrario, Al Cuba ser reconocida Internacionalmente como un país donde se reconocen las parejas LGBT, políticamente posiciona la credibilidad del régimen como “Gay Friendly”, abre las puertas a la industria turística LGBT+, privada y estatal . Todo ese dinero va directamente al bolsillo del mandamás.
Ahora, creo que dependerá del colectivo cubano de la diversidad sexual residente en Cuba y el exterior aprovechar esta oportunidad para posicionarse como pueda al mismo tiempo que el gobierno comenzó su nueva jugada, queda por parte de las minorías sexuales saber jugarlo y no quedarse en el papel de agradecidos obedientes.
No estoy negando el logro de mis colegas del colectivo del cual soy parte y luché cuando vivía en la isla.
Simplemente quiero llamar la atención de que la pelea ahora es en serio. Finalmente comienzan las grandes ligas. Antes no existíamos. Ahora seremos conocidos y reconocidos en el círculo familiar de la mayor de las Antillas. Pero acaso creen que poder casarse y adoptar llenará el estómago, les permitirá vivir libres en pensamiento y expresión?
Les dejo eso de tarea.
Suscribo cada palabra.
Así a como el gobierno cubano se quiere aprovechar de la comunidad LGBTI+ es que la comunidad empezará a hacerse notar, me acuerdo de en algún momento ver documentales de una persona trans en Cuba y espero que más cosas así empiecen a salir de la filmografía cubana.