Una Guantanamera con Villa Clara
Rosa Martinez
HAVANA TIMES, 30 de Marzo — Soy fiel seguidora de la pelota cubana. Ir al estadio constituye una de las fiestas populares que más disfruto desde muy pequeña: los grupos musicales, las griterías ante cada batazo del equipo de casa, los cantos burlones hacia el contrario, y las siempre amistosas disputas con los árbitros.
Si fuera una apostadora, este año hubiera quedado en bancarrota durante los play off, pues todos los equipos que he defendido fielmente han resultado eliminados.
Primero se quedó en el camino el equipo representativo de Guantánamo, mi provincia, Los Indios del Guaso, quienes después de tener una excelente primera mitad de campaña, comenzaron a ceder poco a poco luego del descanso de fin de año, hasta acabar siendo barridos por los Tigres de Ciego de Avila en la primera fase de la postemporada.
Igual quedó atrás Santiago de Cuba —mis favoritos de por vida, seguidos por los guantanameros, claro— quienes brindaron gran colorido en una batalla que los llevó hasta el sexto juego, pero finalmente el pitcheo, como en casi toda la temporada, no le respondió.
Perdió también Ciego ante Villa Clara, y aunque simpatizo con los dos equipos del centro del país, hubiera preferido que los avileños clasificaran para la gran final.
En occidente, mi preferido era el equipo más ganador y estable de todo el campeonato: Sancti Spíritus, pero bien dijo mi hermano: “oye, Los Gallos no saben jugar play off, eso está demostrado y frente a Industriales mucho menos”.
Fui terca y aposté por los chicos de Gourriel, pero qué va, Los Gallos huyeron sin apenas comenzar la pelea, hicieron grande a un equipo que no lo es tanto, y el León mostró sus garras dentro y fuera de su jaula.
Ahora se discute la gran final y, por supuesto, voy en contra de Industriales, no solo porque las Naranjas de Martín son los campeones del oriente —por cercanía geográfica— sino también porque la reacción de los Azules en el altercado contra los espirituanos dejó mucho que desear, por la actitud antideportiva, y muchos cubanos nos sentimos muy decepcionados por las imágenes.
Me pregunto si la dirección del béisbol en Cuba hubiera adoptado las mismas medidas disciplinarias, si los protagonistas del lamentable incidente hubieran sido los muchachos de otro equipo no tan querido por la prensa nacional o por lo narradores deportivos.
Espero que en los dos juegos que están por desarrollarse en el embellecido Augusto César Sandino en Santa Clara —si es que se llega al 7mo desafío— predomine la disciplina tanto del público espectador como de los peloteros.
Espero también que Héctor Rodríguez y Modesto Agüero (los narradores de la TV cubana) se emocionen al narrar un batazo de Pestano, como lo hacen con uno de Malleta, y en sus comentarios sean imparciales; que los árbitros no decidan los juegos con pésimas decisiones que empañan el espectáculo y traen discusiones innecesarias, y dañan a la larga al principal protagonista de esta gran fiesta cubana: el pueblo.
Así que esta noche y miercoles (se fuera necesario un septimo juego), como casi todos los habitantes de esta Isla, me mantendré expectante frente a mi televisor, esperando que gane el mejor, dando por sentado, por supuesto, que será Villa Clara, aunque Industriales luchará, como siempre, por ser campeón.
Para ver el sexto y septimo juego de la serie Villa Clara vs. Industriales visita Cubavision Internacional.