Ahora Cuba tiene gobernadores: Correr para quedarse en el sitio
Por Ale Dumarais
HAVANA TIMES – Pues sí, después de las “elecciones” llevadas a cabo este fin de semana, Cuba vuelve a tener gobernadores provinciales que el venidero día 8 asumirán oficialmente sus cargos.
Cumpliendo con las modificaciones constitucionales aprobadas en referendo el año pasado, las figuras de presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular y aún la propia Asamblea, desaparecieron previamente y ahora dan paso a unas autoridades que, al menos en su denominación, parecen dejar atrás estructuras copiadas del modelo soviético.
Ahora bien, ¿cuál ha sido el papel de los electores, del ciudadano común que ve con recelo o indiferencia estos cambios? Pues, en la práctica, ninguno. Los colegios electorales se abrieron solo para los delegados de las Asambleas Municipales que depositaron allí una papeleta que… Bueno, tampoco se hizo pública previamente esta papeleta que incluía los cargos de gobernador y vicegobernador.
No hubo campaña electoral, ni siquiera esas fotos que en otros procesos han aparecido en las paredes de esquinas, bodegas, y bajo las cuales puede leerse una síntesis biográfica del candidato, en la que se refieren sus títulos académicos y participación en organizaciones como el Partido Comunista, los Comités de Defensa de la Revolución, etc. (según el oficialista diario Granma, esta información se entregó previamente a los delegados que ejercieron el derecho al sufragio).
Los habitantes de las provincias no tenían ni idea de quiénes serían los candidatos a gobernarlos (y puede que les importara un bledo, todo hay que decirlo) y, aunque se supone que se recogieron opiniones y sugerencias desde las bases, jamás trascendió a la opinión pública una lista de futuribles.
Es que tampoco era necesaria, al menos constitucionalmente, pues en la extraña democracia que establece la Carta Magna cubana, es el presidente de la República quien propone los nombres que considera adecuados para esos cargos y los delegados a las Asambleas Municipales del Poder Popular se limitan a votar (en la práctica a aprobar) dicha candidatura única (el derecho, la posibilidad real de elegir, y no meramente ratificar la elección de otros, sigue siendo una quimera).
Todos los candidatos, según informara en horas de la noche de este sábado Alina Balseiro, presidenta del Consejo Electoral Nacional, absolutamente todos los gobernadores y vicegobernadores propuestos resultaron elegidos con más del noventa por ciento de los votos válidos, unas cifras de aprobación que raramente se encuentran en las democracias latinoamericanas o europeas, pero que siguen siendo la norma en nuestros procesos electorales, de los que los medios oficiales de prensa destacarán, como es usual, su transparencia, el altísimo quórum, la elevada presencia de mujeres en las candidaturas, la composición étnica de estas, nivel de escolaridad.
¿Los planes de gobierno de los que asumen sus nuevos cargos? En realidad, nadie cree que los tengan, más allá del panfleto, el eterno llamado a superar deficiencias, señalar al Gobierno estadounidense como responsable de las penas y sinsabores de los cubanos y llamar a seguir trabajando abnegadamente.
Ahora bien, ¿qué poderes concretos tendrán estas nuevas figuras?, ¿Cómo desarrollarán su trabajo? ¿Qué nuevo aparato de gobierno provincial se propone?, ¿Tendrán una autonomía real para llevar a cabo las transformaciones que precisa la sociedad cubana?
Este cambio, que se suma a otros como la designación de Manuel Marrero como primer ministro y la renovación de cargos al frente de algunos ministerios y vicepresidencias, poco afecta a la realidad política y social del país. A fin de cuentas, la Constitución establece claramente el papel rector del Partido Comunista ad infinitum, con lo que la autoridad real de las nuevas figuras públicas y su margen para tomar decisiones estará limitado a los designios del núcleo duro del Partido que sigue siendo controlado por Raúl Castro y las figuras históricas de la Revolución.
Ya sé ha dicho muchas veces. Los cambios en Cuba funcionan como retoques cosméticos, como parte de esa vieja política de cambiar todo para que siga igual, de vivir una vez más como la reina roja toma de la mano a Alicia para emprender una carrera desenfrenada que no lleva a ninguna parte.
Aquí la lista de los nuevos gobernadores y vicegobernadores provinciales y los porcentajes de votos que recibieron en la elección cerrada.
Pinar del Río
Gobernador: Rubén Ramos Moreno
Porciento de votación: 99.44%
Vicegobernador: Niurka Rodríguez Hernández
Porciento de votación: 96.61%
Artemisa
Gobernador: Ricardo Concepción Rodríguez
Porciento de votación: 99.10%
Vicegobernador: Yamina Duarte Duarte
Porciento de votación: 97.59%
La Habana
Gobernador: Reinaldo García Zapata
Porciento de votación: 98.24%
Vicegobernador: Yanet Hernández Pérez
Porciento de votación: 94.95%
Mayabeque
Gobernador: Tamara Valido Benítez
Porciento de votación: 94.73%
Vicegobernador: Manuel Aguiar Lamas
Porciento de votación: 93.67%
Matanzas
Gobernador: Mario Felipe Sabines Lorenzo
Porciento de votación: 98.00%
Vicegobernador: Marieta Caridad Poey Zamora
Porciento de votación: 96.94%
Villa Clara
Gobernador: Alberto López Díaz
Porciento de votación: 98.78%
Vicegobernador: Milaxy Yanet Sánchez Armas
Porciento de votación: 98.47%
Cienfuegos
Gobernador: Alexandre Corona Quintero
Porciento de votación: 99.03%
Vicegobernador: Yolexis Rodríguez Armada
Porciento de votación: 97.86%
Sancti Spiritus
Gobernador: Teresita Romero Rodríguez
Porciento de votación: 95.00%
Vicegobernador: Frank Osbel Cañizares Rodríguez
Porciento de votación: 97.81%
Ciego de Ávila
Gobernador: Tomás Alexis Martín Venegas
Porciento de votación: 99.63%
Vicegobernador: Ania Rosa Francisco Malde
Porciento de votación: 97.25%
Camagüey
Gobernador: Yoseily Góngora López
Porciento de votación: 98.24%
Vicegobernador: Carmen María Hernández Requejo
Porciento de votación: 97.65%
Las Tunas
Gobernador: Jaime Ernesto Chiang Vega
Porciento de votación: 99.85%
Vicegobernador: Yelenys Tornet Menéndez
Porciento de votación: 97.71%
Holguín
Gobernador: Julio César Estupiñán Rodríguez
Porciento de votación: 97.74%
Vicegobernador: Yunia Pérez Hernández
Porciento de votación: 95.81%
Granma
Gobernador: Francisco Alexis Escribano Cruz
Porciento de votación: 95.69%
Vicegobernador: Yanetsy Terry Gutiérrez
Porciento de votación: 99.68%
Santiago de Cuba
Gobernador: Beatriz Johnson Urrutia
Porciento de votación: 99.58%
Vicegobernador: Manuel Falcón Hernández
Porciento de votación: 95.76%
Guantánamo
Gobernador: Emilio Matos Mosqueda
Porciento de votación: 99.83%
Vicegobernador: Alis Azahares Torreblanca
Porciento de votación: 98.81%
Los gobernadores en las provincias, los pone el presidente, los pone el partido, que importa lo que importa es su función en el cargo y si cumple las necesidades, lo demás para que preguntar, no tienen poder de decisión, no tienen recurso, no pueden disponer de lo que la provincia genera en ganancia, si los quitas o los pones es la misma situación, muchos cargo y un solo mandato.
El cancer, si no se corta de cuajo, solo produce metástasis.
Hará algo con mi barrio, Riomar se cae a pedazos hace décadas…, espacios desperdiciados donde se pueden construir obras sociales,,,, un bosque cercado por varios años y llenandose de maleza…, un parque a oscuras porque se llevaron los faroles, que lleva varios años en la oscuridad total, y alli apareció un cádaver hace tres años…
El título lo resume todo. Es pura pamplina, retoques cosméticos. Si hubiese democracia y autonomía en los municipios y democracia y separación de poderes en el gobierno nacional, la cosa fuera diferente. No importara que el gobierno provincial fuese un escalón delo ejecutivo a manera de acercamiento al territorio, sin mucha consulta popular o ninguna. Pero es autoritarismo y despotismo y pamplina e invento de elecciones cuando no hay nada que elegir ni nada que consultar, es como un invento para aparentar democracia, pero no creo que engañen a nadie que se dejen de gastar dinero, tiempo y energía en aparentar democracia y estado de derecho, que se quiten la careta y digan somos los dueños del país y ya. Porque invierten muchísimo en aparentar lo que no son. El pueblo no puede decidir nada, todo lo decide el partido a través de un modelo estrictamente controlado e indirecto.