Nicaragua: Fallece el doctor Carlos Tünnermann Bernheim
El académico fue fundador y expresidente de la Alianza Cívica. Rector de la UNAN-León, ministro de Educación y embajador en Estados Unidos
HAVANA TIMES – El intelectual nicaragüense Carlos Tünnermann Bernheim, de 90 años, falleció la noche de este martes 26 de marzo de 2024, en el hospital Vivian Pellas. Opositor a la dictadura de Daniel Ortega, fue presidente de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, y uno de los participantes del diálogo nacional, en el cual se firmaron una serie de acuerdos que el régimen incumplió.
Los familiares del intelectual señalaron en un comunicado que el deceso ocurrió “después de una larga dolencia médica”, y subrayaron que no pueden “estar más orgullosos de su vida y de su legado, una vida llena de compromiso y entrega”.
“Como esposo, padre, abuelo, educador, y gran ser humano, su ejemplo perdurará por los años. Siempre será un referente para todos y nos enorgullece haber sido parte de su vida”, dice el comunicado.
En el escrito, los familiares también agradecieron todas las muestras de afecto y cariño, y pidieron privacidad “en estos momentos tan dolorosos y difíciles”.
Carlos Tünnermann Bernheim nació el 10 de mayo de 1933 en Managua y deja un legado enorme en el campo de la educación, la defensa de los derechos humanos y las organizaciones de la sociedad civil.
En 2018 dijo a la revista Niú que su “gran ambición es que, si algún día se me quiere recordar, es que me recuerden como un ciudadano. Nada más. Como un ciudadano que trató de cumplir con lo que representa ser ciudadano. Es lo más honroso”.
Luchador incansable por la democracia
Para el político opositor, Juan Sebastián Chamorro, Tünnermann fue ante todo “un abogado” y le importaba mucho lo que decía, escribía y firmaba. “Me parece una ironía que haya fallecido cinco años exactamente después de la firma de aquellos acuerdos de respeto a las garantías constitucionales que él firmó y que el régimen violentó al día siguiente”, subrayó.
Chamorro recordó también que Tünnermann “definió la agenda de aquel primer diálogo nacional, que incluía la democratización, cosa que —como sabemos— el régimen no quiso cumplir”.
La Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) expresó sus muestras de condolencias por el fallecimiento del doctor Tünnermann, a quien describieron como un “destacado ciudadano, jurista, académico, defensor de derechos humanos e incansable luchador por la libertad y la democracia en Nicaragua”.
Paradójicamente el régimen orteguista, que en los últimos años se dedicó a perseguir a Tünnermann, también expresó muestras de condolencias por su muerte.
“Reconocemos el aporte del doctor Carlos Tünnermann Bernheim, quien como ministro de Educación dio especial contribución a la epopeya de la Cruzada Nacional de Alfabetización. Esos aportes serán recordados con gratitud en la historia épica de la revolución”, dice la nota del régimen.
Un intelectual desde muy joven
Tünnermann debutó como abogado tras el asesinato de Anastasio Somoza García en 1956, a manos de Rigoberto López Pérez, defendiendo en consejo de guerra a su compañero de clases, Tomás Borge Martínez, acusado de haber encubierto el magnicidio.
Asus 24 años fue nombrado secretario general de la UNAN-León. Un año después, el 27 de marzo de 1958, a fuerza de decreto, Luis Somoza aprobó la autonomía universitaria. En los años siguientes se trasladó a Costa Rica para ocupar varios cargos dentro de la academia regional.
Fue rector de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-León) por diez años (1964-74). Impulsó transcendentales cambios como la construcción de recintos, edificios y consiguió el terreno donde su sucesor construiría el campus de Medicina. Encabezó la investigación que dio con las ruinas de León Viejo, a medida que gestionaba ante Somoza la libertad de estudiantes presos tildados de terroristas por unirse a la guerrilla sandinista.
Carlos Tünnermann había ganado una beca Guggenheim, que le permitió en un año escribir un libro sobre la historia de la universidad en América Latina. El académico habría de regresar otra vez a Nicaragua la tarde del 5 de julio de 1978.
Un académico en el grupo de Los Doce
Estaba en Colombia trabajando para la Unesco cuando su antiguo alumno Sergio Ramírez llegó a hablarle del proyecto revolucionario que pronto triunfaría en Nicaragua.
“La Junta de Gobierno que se constituye en el exilio me nombra ministro de Educación. De inmediato comienzo a trabajar con Miguel De Castilla el plan para la alfabetización”, dijo el exministro en el 2018.
La Cruzada Nacional de Alfabetización significó que la tasa de analfabetismo bajara del 50.3% al 12.9% en Nicaragua. Bajo el ministerio del exrector también se construyeron 1400 escuelas y 41 Institutos de secundaria. Consiguió además que la educación de prescolar se incorporara al sistema educativo.
Tünnermann también fue embajador de Nicaragua en Washington, de donde fue expulsado por el Gobierno norteamericano en 1988.
Carlos Tünnermann dedicó sus últimos años a trabajar con la sociedad civil organizada, en organizaciones como Ética y Transparencia, el Movimiento por Nicaragua, la Unión Ciudadana por la Democracia y a partir de 2018 en la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia.