Las voces que claman ser escuchadas

Por Paula Henríquez

El artista junto a uno de sus cuadros.

HAVANA TIMES – Su proceso creativo no es una simple representación visual para mostrar los dibujos realistas a carboncillo, sino una suerte de tesis en la que las premoniciones forman parte de esos seres de sus dibujos, que cuentan lo desconocido para el espectador.

Se diría que las sombras presentes en sus obras son voces clamando ser escuchadas, oscuridades que sugieren una atmósfera dramática que pueden mutilar o exaltar la psicología de los individuos representados.

Jordan Rojas Sánchez se siente atraído en estos tiempos por los rostros, por la psicología y las vivencias de esos seres que asegura le han acompañado toda la vida. Él mismo alega que son obras en las que la carga metafísica se deduce a partir del constante desafío entre las luces y las sombras. Son sus experiencias más tempranas, de la infancia, de esa manera de percibir el mundo en esa etapa.

El joven de solo 28 años ha logrado, al parecer, encontrar una manera de expresar el sentimiento afín a estas primeras vivencias, actualmente desde una perspectiva más aguda, más madura. Es su forma de exorcizar los demonios, como él mismo describiera.

Esta entrevista pretende acercarse a este joven pintor de la Cuba contemporánea. No es de los más reconocidos, pero, sin duda, es tan solo un ejemplo más de los muchos jóvenes y en ocasiones no tan jóvenes talentos que pasan desapercibidos.

¿De dónde viene Jordan Rojas Sánchez?

JRS: Yo nací en La Habana, en el municipio de Marianao y provengo de una familia humilde. Desde temprana edad comencé a inclinarme por la pintura. Mi madre y familiares más cercanos me apoyaron mucho. Comencé a visitar museos, galerías de arte, donde fui nutriéndome de ese arte tan exquisito que tenemos en nuestro país. Fue entonces que comenzó a crecer dentro de mí ese anhelo de aportar grandes obras al arte cubano y formar parte, de esa manera, del elenco de artistas de mi tierra.

Por Jordan Rojas Sánchez

¿Qué artistas de la plástica nacionales o internacionales te inspiran? ¿Por qué?

Los artistas nacionales que me inspiran son Arturo Montoto, Cosme Proenza, Roberto Fabelo, y los internacionales, Caravaggio, Rembrandt, Vermeer, Gottfried Helnwein, entre otros. Sus obras son las responsables de cómo yo he ido aprendiendo a ver y también representar la realidad de una manera verosímil, así como de poder llegar al espectador con más claridad. De ellos he aprendido también a lograr esa manipulación especial de la luz y las sombras, algo fundamental en mi obra.

Pero… ¿has estudiado alguna vez pintura? ¿De dónde proviene tu habilidad?

Para responder a tu pregunta debo decir primero que dibujo desde que tenía aproximadamente 5 años. Era algo que no podía dejar de hacer y luego llegó la necesidad de hacerlo cada vez mejor. Yo creo que mi inclinación y habilidad vienen de mi tío y mi primo. Ellos también son pintores, no reconocidos, pero son artistas de la plástica. Recuerdo que pasaba largas horas observando cada dibujo que hacían, para luego correr a mi hoja y reproducirlo.

Nunca he estudiado pintura, sin embargo, en el pasado mes de febrero decidí presentarme a hacer las pruebas en la Academia de San Alejandro, en el Curso por Trabajadores. Sentí mucho temor, porque nunca había dibujado delante de tantas personas. No pasé las pruebas y no me preguntes el porqué, pues no lo sé. Al parecer el derecho es reservado.

No obstante, sí he estudiado a mi manera y a la manera de Arturo Montoto, con quien he pasado cursos intensivos de Dibujo y Pintura en dos ocasiones, la primera de 2013 a 2015, y la segunda, de 2017 a 2018.

Jordan con una de sus obras.

¿Qué temas prefieres y en qué formatos?

Prefiero el dibujo de figuras humanas hasta el momento, porque me permiten expresar mi realidad de una manera muy sincera. Y en cuanto a los formatos, me siento muy cómodo trabajando grandes formatos como los de 200 x 180 cm, ya que mi obra requiere ser representada de esa forma impactante, tanto por la escala como por la carga psicológica de cada personaje.

¿Qué tiempo te toma terminar un trabajo de ese tamaño? Háblanos sobre ese proceso

Bueno… ese tipo de formatos suele tomar unos 15 o 20 días. A pesar de que suene cansino, es un proceso que disfruto mucho, me preocupo porque en cada centímetro del cuadro esté el mensaje que quiero trasmitir. Para ello suelo realizar una serie de encuestas a personas cercanas o del barrio e incluso fuera de este.

¿Encuestas?

Sí, preguntas que tienen que ver con el tema que quiero tratar en el trabajo que esté por realizar. Lo que hago es acumular toda la información y estudiarla para luego hacer fotos a familiares o a personas cercanas. Después comienzo con el proceso del cuadro, la perspectiva, la intención, la escala que este me exige, cuántos personajes voy a representar y cómo voy a manipular la luz y la sombra.

Como joven artista de la plástica, ¿cuáles crees que sean los principales desafíos de un pintor en la Cuba contemporánea?

Yo diría que uno de los principales retos es enfrentar la falta de materiales y también de oportunidades de hacer exposiciones. También de participar en algunos eventos si no se tiene un carné de creador.

¿Cómo es eso del carné de creador?

No soy graduado de ninguna escuela de pintura, por lo tanto, no tengo documento que me identifique como pintor. Sin ese documento no es posible realizar exposiciones ni participar en eventos.

Por Jordan Rojas Sánchez

Se sabe que en la Isla hay muchos jóvenes y no tan jóvenes con muchísimo talento y que no son tan reconocidos como otros… ¿a qué crees que se deba esto?

Es cierto que hay muchos con gran talento, pero de esos no todos llegan a ser artistas, puesto que existen acontecimientos frustrantes en la vida que alejan del camino a aquellos que no creyeron en sí mismos.

Como, por ejemplo, la negativa de entrar a la Academia San Alejandro…

Exacto. Esa podría ser una de esas situaciones frustrantes, pero yo creo que cada artista emergente primero debe saber quién es, de dónde viene, cuál es su realidad y, partiendo de ahí, buscar la manera más sincera para representarla, en cualquier disciplina de las artes. Es sumamente importante tener muy claro el objetivo que se persigue con el arte para poder, entonces, trazar metas.

¿Qué opinión te merece el arte cubano en general?

El arte cubano fue, es y será muy rico en su totalidad. Nosotros los cubanos gozamos de una frescura artística muy original. Yo considero que el arte cubano es, en general, exquisito.

¿En qué trabajas actualmente?

En estos momentos me encuentro preparando una exposición que tendrá lugar en la galería Teodoro Ramos, del municipio de Cerro. Allí se mostrarán 6 piezas de 200 x 1.80 cm que representan la figura humana rodeada de una atmósfera dramática. El nombre de la exposición será Premoniciones.