¿Necesitamos leche o bellos juguetes?
Veronica Fernandez
El nieto de mi amiga Aida ya tiene 8 años y le encanta tomar leche. Al nacer, no se pudo criar con la leche del pecho de su madre y comenzaron a darle la leche en polvo que le correspondía por la libreta de la bodega hasta la edad de 7 años. Ya, al cumplir los 8, no tiene ningún derecho a recibir leche de la canasta básica de los productos normados por la libreta en Cuba.
Mi amiga esta vuelto loca porque en los últimos días no encuentra a ninguna persona que le venda leche por la izquierda (mercado negro) y en la “shoping”, una bolsa de solo 2 libras cuesta mas de 5 cuc (US $6.25) y es imposible abastecer la sed de leche de un niño durante un mes completo con el salario de una persona a la que solo le pagan en moneda nacional el equivalente a 10 cuc cada treinta días.
Me comenta que su salario del mes pasado lo tuvo que cambiar completo para poder comprarle al niño 2 bolsas de leche y que con el salario de su hija, que es la madre de ese niño, tuvieron que arreglárselas para pasar el mes y que han pasado muchas necesidades.
Pues su hija también gana el equivalente a 10 cuc mensuales y por supuesto, han tenido que comprar aceite, puré de tomate, jabón para bañarse, en fin, que no solo es la comida, sino también es el aseo, es poder tener lo mas mínimo en una casa para subsistir. Me manifiesta que su único anhelo en la vida es poder criar a su nieto para que sea un hombre fuerte y saludable, que no pide nada más.
Hoy me la encontré muy angustiada caminando por las calles de Cojimar (reparto situado al este de la bahía de la Habana) y en un alto que hizo en el camino, me dijo que ya ni en la propia shoping existe leche para su nieto, que no sabe que hacer, hacia donde dirigirse, que ya no puede mas con esta situación. Es increíble, pero cierto. Hay períodos que no existe este producto tan necesario en ninguna de las shoping del reparto e incluso, en otros barrios colindantes tampoco la encontró.
De nuevo viene a mi mente el bloqueo económico hacia Cuba y las grandes limitaciones que enfrentamos a raíz de esto, pero lo que no me cabe en mi cabeza es el por que no se ha priorizado este esencial y básico producto en los lugares de venta destinados a la población que aunque sean en cuc y a altos precios, las personas que tengan bajo su amparo un niño o un anciano, al menos tienen esta opción para garantizarle esa toma de leche en las mañanas o en las noches a quienes están mas necesitados.
En realidad, nunca había visto a las shoping de mi reparto sin este producto; sin embargo, la vida es ingrata, pues en este momento esas tiendas que hoy escasean de leche, tienen exhibiendo al publico, grandes y bellos juguetes que deslumbran a cuantas personas acuden a sus establecimientos y por supuesto, excesivamente caros, pero están en oferta para los niños.
¿Puede ser esto normal? ¿Puede estar acorde con nuestras realidades y necesidades? Al contrario, la mayoría de los padres y abuelos de estos niños no pueden adquirir estos juguetes por mucho que quieran comprárselos a sus hijos y nietos.
Ellos, al igual que yo, sufrimos por percatarnos lo contradictorio de nuestro mundo, lo ingrato y desagradable que se nos hace porque hay personas que nos lo ponen más difíciles y nos hacen más cruda esta realidad.
¿Como podemos darnos el lujo de mostrar en nuestras tiendas en cuc fantásticos juguetes, si no tenemos para ofertar lo que mas busca la población, lo mas necesario? ¿Es que queremos tapar el sol con un dedo?¿Por que hay que soportar esta incongruencia en el mercado? ¿Por qué no nos planificamos mejor para que siempre existan los productos de primera índole en este mercado cubano de cuc?
Es totalmente risible e irónico a su vez encontrarnos estas cosas, tal parece que se hacen a propósito y con toda la mal intención del mundo.
Como siempre, dice mucha gente y entre ellas yo, el mayor bloqueo lo hacemos y lo tenemos nosotros mismos con hacer que las personas cada día se sientan mas desalentadas e inconformes.
Pienso que no hay razón ni motivo para mostrar lo inalcanzable para muchos como son estos carísimos juguetes y no existir por otra parte, productos de primera necesidad en los que con extraordinario esfuerzo, al menos, la población cubana puede tener un mínimo de respiro porque saben que están.
La ultima vez que fui a Cuba fueron 3 anos atras y ya no existia la leche, tuve que pasar los 15 dias de mi visita tomando yogurt que los pagabo a 20 pesos la borsa