Milada Milhet: de las voces de hoy en Cuba

Helson Hernández

Milada Milhet
Milada Milhet

HAVANA TIMES — Milada Milhet es una cantante cubana que ha alcanzado una  proyección que la diferencia del resto de las intérpretes cubanas, por su originalidad musical. “Hacer música es algo que nadie puede quitarme”, dijo en su entrevista con HT.

HT: Su carrera comienza lejos de La Habana.

Milada Milhet: Comencé a cantar en Santiago de Cuba, especialmente en las noches de la calle Heredia, la principal arteria cultural de la ciudad, entre trovadores como René Urquijo, José Antonio Nicolás, José Aquiles y Luís Felipe Pérez Veranez (Felipón), a golpe de guitarra, pues siempre me he sentido identificada con la canción de autor. De hecho, fui miembro del movimiento de la Nueva Trova y de la Asociación Hermanos Saiz de Santiago. También fui vocalista del grupo Soneto, donde hacíamos trova, fusión, pop, jazz y música cubana. Más tarde, comencé mi camino en solitario presentándome en escenarios como La Maison, Tropicana y diversas salas, hoteles y teatros de la ciudad, en muy variados y diversos espectáculos. Esta etapa fue de gran aprendizaje para mí.

HT: ¿Cómo llega entonces a la gran capital?

MM: De la mano de la familia de una personalidad de la cultura cubana, Luis Carbonell. Mi ilusión era crecer como cantante, acumular experiencias, afrontar los escenarios capitalinos y su público, y poder llegar a los medios de difusión nacionales, a nivel de radio, televisión y casas discográficas. Como en muchos otros países del mundo, las capitales siempre acumulan medios, posibilidades y oportunidades, que difícilmente se dan en la periferia.

HT: ¿Luis Carbonell en su desarrollo profesional?

MM: Luis Carbonell significa un antes y un después en mi carrera musical y en mi madurez como intérprete. Recién llegada a La Habana, se convirtió en mi repertorista, mi gran maestro y amigo. Con él estudié y monté un amplísimo abanico de canciones cubanas y latino-americanas. Sus enseñanzas siempre fueron más allá de la canción en sí. Es un artista integral, con un concepto integral del arte. Siempre me deslumbró su gran sabiduría, su inteligencia, su agudeza, su capacidad de síntesis y perspicacia para llegar al foco a resolver. Siempre sentí y he sentido su apoyo como maestro y como ser humano. Nuestra relación no se ha visto interrumpida nunca, y como buenos amigos nos hablamos por teléfono, y frecuentemente le visito en su domicilio. Está absolutamente al tanto de todo cuanto estoy haciendo, y siempre me orienta en ello. Sus conversaciones son auténticas clases magistrales, y es algo que disfruto mucho. Finalmente, destacar su gran humildad, sensibilidad y su grandeza artística y humana.

Milada Milhet
Milada Milhet

HT: ¿Si fuera a definirse como cantante?

MM: Me defino como una cancionera de estos tiempos y muy cubana.

HT: ¿Qué circunstancias propician su vínculo con España?

MM: En el 2000 grabo en Cuba mi primer Cd “Cautivos”, bajo la producción musical y arreglos de Eddy Cardoza, con temas que van desde el pop-rock melódico, a baladas y canciones. En el disco intervienen músicos cubanos de reconocido prestigio como el guitarrista de jazz Jorge Luis Chicoy, el trompetista Julito Padrón, Oliver Valdés en el drums, o el tumbador Eduardo Lazaga. Ya en España, lo que en un principio iba a ser una promoción discográfica, se convirtió en una fructífera estadía de seis años donde desarrollé una ardua labor cultural y musical, presentándome en teatros, salas de concierto, discotecas, y fiestas patronales a lo largo y ancho de la geografía hispánica e insular.

HT: ¿En España graba también uno de sus discos?

MM: Si, en España, en el año 2005, grabé mi segundo Cd, titulado “A mi manera”, que dediqué con todo mi cariño y gratitud a mi maestro Luis Carbonell, pues sin él, no habría sido posible llegar a este trabajo. Este Cd, recoge 11 temas de clásicos cubanos y latinoamericanos, fusionando estas músicas con el pop y el rock, dando a la guitarra eléctrica un protagonismo especial, pues vestida de sonidos saturados y de overdrive, hace rock dentro de un son, contrapuntea a la voz, o canta cual si fuera una trompeta, una flauta, o hasta un mismísimo sonero… El álbum, es a su vez, fiel reflejo del tipo de repertorio que abordé durante mi permanencia en este país, así como mi forma de afrontarlo. Mi propósito era recoger lo más puramente posible toda esa esencia, así como toda la energía de las presentaciones de la banda en vivo o directo, como gustan decir en España. La banda estaba formada por músicos cubanos, venezolanos y canarios.

HT: ¿Otras producciones importantes?

MM: Sin duda, mi más reciente producción discográfica titulada “Travesía”, grabada en Cuba en el 2013, bajo la producción musical y arreglos de Roberto Miranda. Y cito esta producción, porque al igual que Luís Carbonell marcó un antes y un después en mi carrera como intérprete y cantante, Roberto Miranda, significa lo mismo, en cuanto a la hora de abordar un repertorio tan netamente cubano, con aires y sonoridades nuevas, expresadas en forma de códigos absolutamente internacionales y actuales, que pueden ser entendidos en otros países y culturas, por generaciones muy variadas. Esta es la producción musical que me define y me resume como intérprete y como la cancionera que he sido y soy desde siempre. Es la producción que refleja aquello para lo que me he estado preparando toda mi vida desde mis comienzos en Santiago, mi venida a La Habana, mi estadía en España, y mi regreso a Cuba.

Milada Milhet (l)
Milada Milhet (l)

HT: Sus versiones han caracterizado su proyección musical.

MM: Definitivamente sí, y puedo decirte, que me siento muy plena y feliz con este trabajo que estoy acometiendo. Ciertamente es algo que siempre he querido hacer, pues son canciones que laten de manera muy especial en mi corazón y sentir, desde siempre. Son canciones e intérpretes cubanos, con los que me identifico plenamente. El tema era, cómo abordarlo, y en este punto, aparece Roberto Miranda, recreando, actualizando y produciendo todas esas versiones, sin violentarlas, sin forzar nada, haciendo un todo muy orgánico y funcional, sacando todo el potencial y belleza que estos temas llevan dentro, llenándolos de lirismo musical y sonoro, haciéndoles más grandes todavía si cabe, y arropando perfectamente mi voz y dándole nuevos vuelos.

HT: A propósito de una de esas versiones, ¿se ha sentido Acorralada?

MM: Pienso que todo ser humano, en mayor o menor medida se ha podido sentir “acorralado” alguna vez en su vida por razones o situaciones muy diversas. No soy diferente al resto de mis congéneres humanos. Así pues, no soy ajena a los acorralamientos, como no lo soy a la risa, al llanto, a la alegría, a la tristeza… en fin, a toda esa amalgama de sentimientos, sensaciones y procederes que dicen nos visten de humanidad.

HT: ¿Y hacer música en Cuba?

MM: Hacer música en cualquier parte del mundo no es cosa fácil. Cada país tiene sus propias peculiaridades y realidades nacionales, culturales, y nosotros evidentemente tenemos las nuestras. Por eso pienso que lo más importante es la determinación de hacerla más allá de las circunstancias que te rodean, pues si te dejas llevar por estas, sencillamente puedes quedarte aplastada en el sillón de tu casa sin ni siquiera intentarlo, dejándote vencer por el peso de todos esos inconvenientes, o puedes acabar de “juglar de las modas y mayorías”, vendiendo tu alma al diablo, y haciendo algo que realmente ni sientes, ni te identificas con ello.

Así pues, nada ni nadie puede sustraerte de la acción de hacer música, si esa es tu voluntad. Otra cosa es la labor de difusión de tú trabajo de las casas discográficas, de la radio y televisión, de las propias empresas musicales, o de los lugares para tocar… que pueden dar alas a tu trabajo o condenarlo al eterno olvido, a veces por causas y factores absolutamente extra-musicales. Cada día de mi vida, sólo me propongo hacer música, la que yo siento. Y hacer música es algo que nadie puede quitarme.