La ópera en Cuba antes y después de Rigoletto

Entrevista con Juan Rodolfo Amán, Premio Nacional de Teatro 2013

Helson Hernadez

Juan Rodolfo Amán
Juan Rodolfo Amán

HAVANA TIMES — Juan Rodolfo Amán, una de las personalidades de la Cultura en la isla, acreedor del más alto reconocimiento de su especialidad, nos cuenta de proyectos y vivencias que han determinado su respetada trayectoria.

Havana Times: Se concibe en otro mundo cultural sino hubiese sido en el teatro?

Juan Rodolfo Amán: Bueno, realmente yo me inicio en el teatro, luego de haber tenido ya experiencias artísticas en la pintura. De hecho empecé a estudiar en la Academia de Artes Plásticas San Alejandro la carrera como tal, y estando en el segundo año publican en la entonces Gaceta de Cuba la obra “Una taza de café”, de Rolando Ferrer, y así comencé, o mejor dicho, desvié mi atención hacia el teatro que se ha prolongado hasta este momento, durante 52 años. Recuerdo que estudiando pintura, formé un grupo de teatro con alumnos de la escuela, y la representación de la anteriormente mencionada obra, fue la que estreno aquel proyecto.

HT: Uno de los primeros directores en utilizar este término: “Teatro Experimental”.

JR: Entre los años 1962 y 1969, teníamos una sala de teatro en las calles habaneras de Galiano y San Miguel, edificación que está actualmente en proceso de derrumbe, allí hacíamos una programación que no detuvimos nunca durante este período con inolvidables espectáculos.

Es bueno decir que fue una labor de gran audacia, pues llamar de experimental una propuesta teatral en aquella época, realmente era eso, una audacia. Experimentamos con monstruos de la dramaturgia universal, con una serie de títulos emblemáticos versionados por mí, además la estructura misma del local era muy novedosa. Siempre desde mis inicios me ha caracterizado eso, reformar, de hecho aún sigo versionando.

Juan Rodolfo Amán, Premio Nacional de Teatro 2013
Juan Rodolfo Amán, Premio Nacional de Teatro 2013

HT: Hablando de versiones, usted pretende convertir a la Ópera una obra del reconocido dramaturgo cubano Virgilio Piñera.

JR: Hay muchos inquietos por saber de que se tratará esta idea, pues aún no he dado mucha información al respecto. Puedo adelantar que será su trascendental obra “Electra Garrigó”, ya adapté el texto para llevarlo a un espectáculo de Ópera, y la música estará a cargo del compositor Juan Piñera. Será por tanto, la primera vez que se lleva una obra de Virgilio Piñera a los códigos de la Ópera, y pensamos que el estreno pueda ser para el próximo año 2014 en La Habana.

HT: Cómo nace su motivación por el Bell Canto.

JR: Yo tenía una tía, que desde los 11 años de edad me llevaba a ver zarzuelas y puestas operísticas, lo cual despertó mi interés por dicho arte.

HT: Su dirección artística ha definido por años la historia del Teatro Lírico Nacional de Cuba.

JR: La primera Ópera que dirigí fue Rigoletto, muy polémica que resultó por cierto. Mi concepción escenográfica primeramente no era para nada de una línea naturalista como hasta ese momento había sido, también los movimientos eran muy violentos. La crítica de la época en una de las publicaciones de la prensa, decía: “La ópera antes y después de Rigoletto”. Hubo mucha gente que no le parecía bien, como hubo otro tanto que si supo apreciar aquella ruptura, pero bueno han pasado los años y todavía lo sigo haciendo por el estilo.

HT: Recibir el reconocimiento nacional de su especialidad.

JR: En las palabras que expresé en la gala de entrega oficial del Premio Nacional de teatro a mi persona, yo comentaba, y lo reafirmo, que este premio está respondiendo a todo lo que yo he hecho, pero también a toda la gente que tuve a mi lado, intérpretes, grupos, colegas. Me da mucha alegría y a la vez, aunque sea manido, la responsabilidad de que nos obliga a más.

De la misma forma esto me ha servido para percatarme de que hay muchas personas que me aprecian, cosa que me llena de emoción y disposición para seguir viviendo para ello. Incluso, en la otra fase, porque así es la vida, y esa otra fase tiene que llegar, pues allí también yo formaré otro grupo de teatro.

HT: Maestro será posible que exista alguna obra de preferencia especial para usted luego de haber dirigido tantas.

JR: Es difícil, es como tener muchos hijos y no puedes tener predilección especial, de todas formas puedo responder que es por momentos. En una época Verdi me llenaba enormemente, después me ha pasado con Puccini, del cual he dirigido La Boheme, que es una de mis preferidas de este autor. Son momentos en que amas tremendamente lo que estas realizando, te enamoras de verdad de ese trabajo.