¿Por qué se ríen de los impedidos físicos?

Mercedes Gonzalez Amade

HAVANA TIMES — El cubano por naturaleza es alegre y se ríe de sus problemas; una forma de enfrentar la vida con entusiasmo.

En nuestro país hay muchos humoristas, unos buenos y otros lo intentan, pero es muy bochornosa la experiencia que tuve al visitar el teatro Mella después de pasar mil vicisitudes para lograr una entrada.

Todo iba muy bien hasta que un grupo llamado La Oveja Negra empezó a imitar defectos físicos, denigrando a los seres que los padecen.

Me sentí incómoda, ofendida, a nada le encontraba gracia, al ver que el público, con toda la cultura que este pueblo tiene, se reía y disfrutaba.

Tal vez porque solo éramos dos personas diferentes en aquel lugar: un anciano y yo, ambos en silla de ruedas.

No todos los que dicen hacer humor saben hacerlo bien.

Sé que es una opción, un modo de vida o una carrera artística, pero para dirigirse al público el humor debería ser inteligente, respetuoso y, más que nada, original para que todo el mundo lo disfrute.

Mi hijo, un niño de once años del que me valgo para casi todas las cosas, me preguntó: “¿Mami, por qué se ríen de los impedidos físicos?”