HAVANA TIMES (dpa) – La Corte Constitucional de Colombia aprobó hoy el matrimonio gay al rechazar una ponencia que señalaba que la unión solamente podía ser entre un hombre y una mujer.
La ponencia del magistrado Jorge Pretelt fue derrotada por seis votos contra tres.
En 2011, el tribunal dio un plazo al Congreso para que a más tardar a mediados de 2013 se pronunciara mediante una ley sobre el matrimonio entre parejas del mismo sexo.
Sin embargo, el Legislativo archivó un proyecto de ley en ese sentido, tras lo cual la Corte Constitucional dijo que las parejas gay podrían acudir ante notarías de la fe pública para celebrar una especie de contrato de unión solemne.
La comunidad gay pidió desde entonces al tribunal que dicho procedimiento no se llamara unión solemne sino matrimonio civil con los mismos derechos y obligaciones frente los matrimonios heterosexuales.
El magistrado Pretelt se opuso en su ponencia a que esa unión se llamase matrimonio civil, pero la postura fue derrotada en la votación efectuada hoy.
Varias parejas homosexuales han acudido desde julio de 2013 a las notarías para formalizar sus uniones, las que hasta ahora no eran consideradas como un matrimonio civil.
La congresista Angélica Lozano, una de las principales líderes de la comunidad gay del país, celebró la decisión de la Corte Constitucional y dijo que así se termina con la discriminación.
“Lo luchamos muchos años y hoy termina una vergüenza histórica en Colombia. A los hombres y mujeres homosexuales de nuestro país se nos impidió proteger a nuestras familias con un elemental contrato civil, el de matrimonio”, dijo la representante a la Cámara del partido independiente Alianza Verde.
“La lucha continúa: acabaremos la discriminación social, real, en la vida, en la familia, en la escuela. La homofobia mata y esta lucha continúa”, concluyó.
En noviembre del año pasado, la Corte Constitucional autorizó la adopción de hijos por parte de parejas gay con los mismos requisitos que se les exige a los heterosexuales.
Dicha autorización amplió una decisión que ya había dado el tribunal en 2014 sobre la adopción de hijos por parte de parejas gay, aunque con el requisito de que el menor fuese el hijo biológico de uno de los solicitantes.
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