Yenisel Rodríguez Pérez
Esa imposición sutil es algo que se respira en cada rincón de la ciudad de Miami. Poco a poco se debelan ante el recién llegado esas actitudes chovinistas de unos emigrados frente a otros.
¿Nacionalismo profundo? No lo creo.
También los centroamericanos y el resto de los latinos de acá, llevan su patria en el corazón, en la cocina y en el habla. No es patrimonio de los cubanos.
La diferencia principal entre el patriotismo popular de los cubanos y el del resto de los latinos de Miami no es de intensidad sino de orientación.
El primero se mantiene cegado con la epopeya de la resistencia popular al castrismo. Y este sentimiento de heroicidad “racial” forja una actitud de superioridad cultural frente a los otros latinoamericanos.
Los no cubanos son considerados inmigrantes comunes y corrientes. Un pueblo de elegidos asediado por hordas de pecadores. Como si los cubanos viniéramos a ser una variante latina de la sociedad israelí.
Mi madrastra nicaragüense me ofrece sus tortillas de maíz con sencillez y sin chovinismo. Al comerlas mi padre me bautizó como “el primer cubano en comer tortilla nicaragüense en Miami”.
De esta manera me he sentido parte de una hegemonía cultural de baja intensidad.
Los cubanos de Miami debemos incorporar un poco de humildad a nuestras prácticas culturales. Decorar con sencillez nuestro potaje de frijoles negros y su bistec de puerco. Para de esta forma permitirle a los otros latinos asumir el gesto de dignidad.
Plantar el árbol de la afectividad latinoamericana de manera que los frutos primaverales traigan el dulzor de las diferencias en armonía. Y extinguir cualquier pretensión de mesianismo cultural.
Con todos y para todos. Como tortilla para frijol.
Figueroa fue secuestrado por hombres armados la mañana del 26 de abril después de dejar…
Rogelio Mendoza de Venezuela tomó nuestra foto del día: "Las bolsas del CLAP" en Lara,…
Cientos de familias trabajadoras soportaron condiciones de salarios mínimos, explotación, falta de acceso a servicios…
Con el motivo de mejorar el uso y la navegación, Havana Times utiliza cookies.