Los ajustes cubanos

Alfredo Fernández Rodríguez

Anoche vi en Tele Sur a dos inmigrantes ilegales en los USA, un mexicano y un guatemalteco, ambos protestaban por los privilegios que brinda el gobierno norteamericano a los isleños que llegan a USA al amparo de la Ley de Ajuste Cubano.

“Basta que un cubano ponga un pie en tierra de USA para que automáticamente esa ley los provea de beneficios por los que nosotros tenemos que esperar años,” decían los ilegales.

Y es que un enemigo inteligente es eso: un enemigo inteligente. ¿No será esa ley una respuesta a la otra ley de ajuste cubano que existe en la isla?

Pues ni el mexicano ni el guatemalteco pierden propiedades y derechos en su país al emigrar a USA,  incluso podrán regresar a él siempre que lo estimen conveniente; sin embargo,  los cubanos al partir son despojados de sus bienes y sólo hasta después de los sesenta años no podrán regresar a vivir de modo permanente en la isla.

Creo que la ley… podría ser la respuesta a la postura del gobierno cubano con sus emigrantes.

Me gustaría ver la eliminación de la “Inhumana” Ley de Ajuste Cubano por los USA como el respeto del estado de Cuba a los legítimos derechos de sus emigrantes.

Y es que las limitaciones a que son sometidos los cubanos al emigrar resultan tan indignantes como al guatemalteco y al mexicano les resulta la Ley de Ajuste Cubano.

Basta emigrar de Cuba para sufrir vejaciones del estado como: perdida de propiedades (vivienda, auto, etc.), tener que hacer solicitud del permiso de entrada al país; siempre que se venga de visita.

O en el mejor de los casos se podrá optar por los “beneficios” de algo denominado Permiso de Residencia en el Exterior (PRE) documento que comprende a aquellos emigrantes que han podido mantener sus propiedades pero no sus otros derechos en la isla.

También el vejamen incluye el Permiso de Residencia en Cuba (PRC), para  personas que viajen temporalmente por asuntos personales, donde al permanecer fuera del país por más de once meses dicho viajero tendrá que abonar una cuota de alrededor de 50 USD mensualmente en la embajada cubana del país donde permanece.

Opino que medidas de menosprecio hacia cubanos que parten al extranjero carecen de sentido, a menos que se pretenda estimular políticas como La ley de Ajuste Cubano.