HAVANA TIMES — El arzobispo de La Habana, Jaime Ortega, una de las figuras claves del deshielo político en Cuba, renunció a su puesto al frente de la Iglesia católica de la isla, según informó hoy el Vaticano, reportó dpa news.
El papa Francisco aceptó la renuncia de Ortega, de 79 años, como arzobispo de la archidiócesis de La Habana, comunicó la Santa Sede.
El cardenal será sustituido a la cabeza de Iglesia cubana por el actual arzobispo de la oriental ciudad de Camagüey, Juan de la Caridad García.
La salida de Ortega estaba prevista por haber superado la edad que el Vaticano suele establecer para el retiro de sus obispos, los 75 años.
El líder de la Iglesia católica en la isla fue uno de los mediadores para el histórico deshielo que Estados Unidos y Cuba pusieron en marcha en diciembre de 2014.
Ortega viajó especialmente a Washington a entregar en persona una carta del papa Francisco dirigida al presidente estadounidense, Barack Obama. El pontífice es visto como uno de los artífices del deshielo entre los dos viejos enemigos ideológicos.
El cardenal Ortega es desde hace años además un interlocutor reconocido del castrismo en Cuba. El arzobispo habanero medió en 2010 con éxito para la liberación de decenas de presos políticos.
Ortega también ha conseguido que se toleren en una ruta predeterminada las marchas pacíficas de opositores que organiza todos los domingos el grupo opositor Damas de Blanco.
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