En general, en todo el mundo, millones de personas marcharon en más de 500 ciudades en contra de dicha trasnacional y sus intentos de introducir semillas transgénicas en diversos países.
En México, diversos colectivos y organizaciones marcharon exigiendo que la trasnacional Monsanto “salga del país”. Los manifestantes marcharon al grito de “Queremos frijoles, queremos maíz, queremos a Monsanto fuera del país”.
En la ciudad de La Plata, Argentina, varios jóvenes también protestaron contra Monsanto. Con pancartas marcharon hacia la municipalidad de La Plata.
Mientras tanto, en Santiago de Chile, cerca de mil personas marcharon para pedir el retiro de Monsanto y el fin de la producción de alimentos transgénicos.
La marcha demandó al gobierno de la presidenta Michelle Bachelet que expulse del país a la transnacional Monsanto y deje de producir semillas con transgénicos.
Según los voceros de los movimientos que protestaron, el 90% de los alimentos procesados contiene transgénicos.
Los activistas que rechazan los transgénicos afirman que este modelo de producción conlleva además de enfermedad y muerte, pérdida de los nutrientes del suelo, pérdida de bosques nativos y biodiversidad.
Además, advierten que los transgénicos están vinculados a la muerte de abejas y otros insectos polinizadores, desplazamiento de las comunidades originarias, desertificación, sequías e inundaciones. (César Joao Espinoza – Agencia Púlsar)