Caso: plaza de Marianao

Warhol P

HAVANA TIMES — Estamos rodeados, y no precisamente por agua, sino de incompetentes, estúpidos, subnormales, y de gente que lucra a costa del pueblo.

Alguna vez ya he hecho alusión a esta plaza donde venden productos alimenticios, y no sé cuándo podré hacer un artículo donde pueda decir algo que favorezca al sitio, y a los consumidores, que al final son los perjudicados.

Hace días intenté hacer algunas fotos, y poco faltó para un linchamiento en público, me gritaron horrores.

Hasta recibí amenazas de una mujer que se sintió violada ante el flash de mi cámara, que tan solo hacia blanco al sitio en sí, y no a ella, que para ser franco no tenía ningún atractivo para aparecer en una de mis instantáneas.

Lo cierto es que tuve que salir del lugar poniendo pie en polvorosa, de no haberlo hecho ahora no estaría escribiendo este post.

Durante varios días consecutivos he visitado el lugar y he notado que hay días en que la policía monta una guardia mañanera, y en ese período todo se mantiene en calma, no hay vendedores por los contornos.

Muchas(os) se mantienen dentro del recinto, haciéndose pasar por compradores, han creado un mecanismo que solo ellas (os) conocen, con el que saben cuando va a llegar la policía, y donde deben ocultar la mercancía para que no se las decomisen.

La policía, no tiene una frecuencia diaria, y cuando no están presentes, las vendedoras(es) por cuenta propia, tienen banderín abierto para revender productos que por el estado son mucho más baratos.

Algo que me deja pensando, es la conexión que ha de existir con los que revenden y los trabajadores de la plaza. Algún método existirá para que estos les propicien la mercancía de manera fácil cuando llega al lugar, por ejemplo: hace tres días, vi que recibieron un cargamento de huevos.

Al día siguiente voy en la mañana, y no tienen huevos en el establecimiento estatal, pero el portal de la plaza está abarrotado de cartones de huevos que los que revenden lo ofrecen a un precio bastante elevado.

Considero que de tener real interés en lo que ocurre en la plaza, ya habrían buscado una manera mas efectiva para combatir a este tipo de elementos, como la de colocar en la misma esquina una cámara de vigilancia perenne, mientras esto no ocurra, las cosas seguirán de mal en peor, para ellos habrán días buenos y días malos, en cambio, para los que van a la plaza a comprar sus alimentos con el dinero de su salario, los días siempre serán malos.