La educación formal en la sociedad actual cubana

Miguel Arias Sánchez

HAVANA TIMES — La educación formal juega un papel determinante en la sociedad de cualquier país.

Cuando yo era pequeño se conocía como Educación Cívica y tenía como objetivo principal crear valores y conductas positivas en el individuo.

Hoy a través de la educación formal que por mucho tiempo se dejó de dar en las escuelas se trata de formar y rescatar valores perdidos, que dejan mucho que desear. Ejemplos hay muchos, basta solo mencionar 2 o 3 para darse cuenta cuánto se ha perdido en ese aspecto en nuestro país.

He presenciado en un ómnibus cómo una persona discapacitada se para frente al asiento de otra que no tiene problemas motores y la última no se inmuta, a pesar de que incluso el asiento está destinado para la persona con necesidades especiales. Cuando alguien les llama la atención primero discuten y después o se levantan renegando o no lo hacen.

Otro ejemplo, alguien se le siente al lado con un radio y el volumen muy alto sin importarle que eso molesta, Usted lo mira como haciéndoselo saber y la música sigue alta por respuesta.

El que lanza una lata vacía por la ventanilla del ómnibus a la calle o el que bota el papel del dulce fuera del cesto, aunque lo haga en algún lugar visible. Todo eso denota el grado de pérdida de valores elementales que deben existir dentro de una sociedad cualquiera.

Por todo ello es tan importante que tanto en la casa como en la escuela se profundice y se haga hincapié en esta formación.

De nada nos vale ser un pueblo instruido si no lo somos también cultos. El dar los buenos días, disculpa, gracias, ceder el asiento a una persona con problemas o a un niño, ayudar a cruzar la calle a un ciego o anciano, nos enaltece, nos hace más humano y, por ende, mucho más fuertes.

Después del fallecimiento de Fidel Castro, se hace mucho énfasis en su concepto de Revolución, donde en una parte del mismo dice: “Tratar y ser tratado como seres humanos”.

Todos esos que son actores principales de los ejemplos que puse al principio de este escrito deberían interiorizar muy bien esa parte del concepto de Fidel para que rectifiquen tan deplorables conductas que van no solo contra los más sagrados valores del ser humano, sino contra los principios y la ética de la propia nación.