El prestigio de Cuba crece en todo el mundo

Elio Delgado Legón

HAVANA TIMES – Cuba es un pequeño archipiélago en el Caribe, del que apenas se hablaba antes de 1959. Era uno más entre los países pobres, subdesarrollados, analfabetos, insalubres, que durante 60 años solo sirvió para que las empresas agrícolas extranjeras, principalmente estadounidenses, tuvieran grandes ganancias a costa del hambre de los campesinos cubanos. Pero con la llegada al poder de la Revolución, todo comenzó a cambiar.

Lo que antes fue una tierra de analfabetos, sumidos en el subdesarrollo, hoy es un Estado que, a pesar de tener que enfrentar un férreo bloqueo que le dificulta hasta la más mínima operación bancaria en cualquier parte del mundo, avanza hacia el desarrollo con pasos seguros y gana prestigio en todo el mundo por su seriedad y por los avances obtenidos en diferentes campos.

La labor solidaria y altruista del pueblo cubano, educado en el internacionalismo, sin egoísmo, ofreciéndole a quien lo necesite parte de lo poco que tenemos, nos ha garantizado la amistad de la mayoría de los pueblos. Desde la gratitud de las naciones africanas, por el papel desempeñado por la Isla en el desarrollo de la historia de ese continente, hasta la colaboración médica en más de 165 países, Cuba ha cosechado amistad, algo que tiene un valor incalculable.

Cuando me refiero al prestigio de Cuba, estoy pensando en la alta evaluación que hacen los países donde se prestan servicios médicos de excelente calidad y las opiniones vertidas por los funcionarios de la ONU al frente de la OMS y la OPS sobre el Sistema de Salud cubano, que todavía no es todo lo óptimo que se quiere, pues debido al bloqueo se dificulta adquirir los equipos médicos más modernos, pero aún así los funcionarios de la ONU lo ponen como ejemplo dentro del mundo subdesarrollado y un poco más allá.

Cuando surgió un grave brote de Ébola en tres países del África occidental, la Organización Mundial de la Salud acudió a Cuba para que colaborara en la erradicación del virus, que amenazaba con extenderse a otras partes del mundo. Eso habla muy claro del prestigio alcanzado por la medicina cubana.

Los centros científicos de nuestro país han tenido resultados asombrosos al obtener medicamentos y vacunas únicos en el mundo y otros que, aunque no son únicos, son superiores a los existentes, lo que consolida el prestigio de la ciencia cubana y de los centros científicos, que en el plan Bush para restaurar el capitalismo en Cuba se decía que había que cerrarlos, porque un país subdesarrollado no podía tener ese tipo de centros, que constituyen un desarrollo.

Todo el resultado científico alcanzado y el que está en vías de obtenerse, pues para eso se trabaja, es consecuencia del desarrollo de la educación cubana, que erradicó el analfabetismo en 1961 y cuenta con un sistema educativo gratuito y de alta calidad, lo que ha sido reconocido por altos funcionarios de la Unesco. Además, Cuba ha contribuido a erradicar el analfabetismo en algunos casos y a disminuirlo en otros, en numerosos países, incluso desarrollados, lo que también ha contribuido a afianzar el prestigio del país en ese campo.

Muy ligado al sistema de educación, también podemos contar con un alto desarrollo en todas las manifestaciones artísticas, sobre todo, en la música, que goza de un elevado prestigio a nivel mundial. Formarse como músico en cualquier país capitalista cuesta mucho dinero, por lo que la mayoría de los talentos se pierden al no poder enfrentar esos estudios; sin embargo aquí no les cuesta absolutamente nada. Por eso hay músicos cubanos trabajando en innumerables lugares planeta y son muy apreciados.

Me he referido solo a algunos aspectos de los que tienen que ver con el prestigio de Cuba en todo el mundo, pero podría agregar el aspecto político, pues cuando un dirigente cubano se para a hablar en una tribuna internacional lo hace con la verdad en la mano y dice lo que muchos quisieran decir. También por eso el prestigio de Cuba crece en todo el mundo.