Los “dueños de la Razón” producen miserias

Dmitri Prieto

HAVANA TIMES — Bueno, después de mi reciente post sobre Radio Martí me acusan de cobarde, de pro-soviético y hasta de odiar secretamente a Occidente.

Sobre lo de Occidente, quizás deba comunicar que entre mis años más felices están los que pasé en Londres estudiando Antropología (básicamente, tuve suerte…), aunque no puedo decir que haya dejado allá de ver qué significa la palabra c-a-p-i-t-a-l-i-s-m-o (así con todas las letras: la racionalidad formal, la Razón instrumental en el poder – y son palabras de Max Weber, un conservador alemán, y no de ningún Konstantinov estalinista…), pero vi libertades y sobre todo comunidades vivas… que creo que son el camino en medio de la crisis.

Miedo –bueno- miedo tenemos todos; sería un acto de soberbia inaudita creerme libre de él; y sobre lo de pro-soviético: tengo amor a Rusia, pero en más de una ocasión pusimos acá en La Habana en lugares públicos materiales sobre lo que pasó en Checoslovaquia en 1968.

Mi Rusia es la de los rebeldes en Kronstadt (1921), la de Alexander Meñ -el cura que mataron a hachazos por predicar la fe cristiana como libertad y no como moral de Estado-, y la de Vladimir Vysotski -cantante rebelde-, no la de Brezhnev, el GenSek del PCUS cuando nací.

En fin. Comparan miméticamente Radio Martí con Granma o la Mesa Redonda, a Randy Alonso lo confrontan con Yoani Sánchez, y ¡qué fácil todo!

¡Ni que sea el caso que todos los medios deban ser como Radio Martí o Granma! No creo que esas comparaciones sea felices; ni que los medios masivos estatales sean camino a la libertad… pero tampoco los administrados por juntas de accionistas.

Ya que estamos en proceso electoral, recuerdo lo que pasó hace 2 años y medio, cuando escribí en HT unos posts confrontando el sistema electoral cubano actual: Candidatos independientes sin plataformas y Las elecciones y el filtro.

Entonces, apareció un artículo http://www.larazon.es/noticia/8966-la-habana-parodia-una-jornada-electoral-municipal de un tal  Ángel Sastre en la versión digital de un periódico ¿español? llamado “La Razón” (nombre que parece un clon liberalista de “Pravda=La Verdad”) donde literalmente decía lo siguiente:

“…«Me pregunto: ¿por qué no podemos los electores enterarnos de cómo nuestros futuros delegados pretenden resolver los problemas de nuestros barrios? ¿Qué piensan sobre la situación del país y las vías  para mejorarla?», dice telefónicamente a LA RAZÓN Dmitri Prieto-Samsonov, un escritor ruso que desde hace 40 años vive en La Habana…”

Demás está decir que no sólo no contesté ninguna entrevista telefónica a la “Razón” (y no por miedo, sino simplemente porque jamás me llamaron), sino que mis palabras fueron en realidad copiadas textualmente de HT, sin dar referencia. Y ni soy escritor ruso, ni vivo en La Habana, ni he cumplido aún los 40.

¡Que respeto por los cubanos y por su libertad de expresión, si se manipula lo que dicen!: parecen lo menos importante… ¿Es esa la “libertad” que quiere “La Razón” para Cuba? ¿Se puede llegar a la libertad por vía de la mentira?

Le escribí un mail algo rabioso al periódico, contacté con unos amigos libertarios, ellos chequearon la web, aparentemente la noticia había desaparecido, aunque quien sabe si después volvieron a ponerla. No gastaré mi poca conectividad para verificarlo.

Jamás recibí la más mínima disculpa de los dueños de “La Razón” por la claramente deliberada “pifia” del tal Sastre.

Así que no sólo medios del Estado combinan verdades con falsedades.

Solo la a-u-t-o-g-e-s-t-i-ó-n (así, con todas las letras: la autoorganización desde abajo) creo que es el camino a la libertad de expresión plena. Y para todxs.