El Luismi es mi preferido

Alfredo Fernández Rodríguez

De todos los comentaristas de HT, el Luismi es mi preferido, pues resulta que sus simpáticas presentaciones, con auto apodos que se mueven desde Luismi la Rata, Luismi el amante, o hasta el denigrante de Luismi el dictador, sirven para presentar a un comentarista sobradamente creativo e inteligente, aunque debo de aclarar que los apodos del Luismi siempre son en consonancia con el post en cuestión.

Cuando indagué por él, Erasmo Calzadilla (colega de HT)  me dijo que era su amigo, y me dijo también que era un gran amante de la filosofía, aunque este aspecto para descubrirlo basta con leer sus comentarios, pues las opiniones de peso son una obsesión en Luismi.

Havanatimes tiene muchos comentaristas asiduos, La Jiraldilla, Otro diferente, Charlene y Andrés, con el oxímoron de apellidos de Castro Cruz, por sólo citar a algunos.   Todos muy buenos y con gran amor por Cuba, pero debo confesarlo, ninguno me divierte tanto al leerlo como el Luismi, con una riqueza de lenguaje que le permite usar registros que pueden moverse desde lo marginal –Chama ¿qué volá? – hasta la exquisita comprensión  que exigen los griegos de la antigüedad.    Nada, que el Luismi a sus veintes ya se nos sirve del lenguaje a su antojo.

Cuando al ver alguien tan joven como el Luismi opinar tan inteligentemente, sólo me queda pedirle, ¡no te pierdas! Por favor, Luismi esa debe ser tu primera obligación desde ya, así que mira el lio en que te has metido por escribir con perspicacia.   Imagino que si el Luismi algún día se encontrara con el gran filosofo cubano Alexis Jardines, lo sé bien, van a conversar por horas.

De los comentarios del Luismi me falta confesar lo fundamental, que muchas veces los he leído presidiendo del post que los provocó, por considerar al primero superior, como cuando al regresar a España, le anotó un comentario a Erasmo con una línea que resume genialmente la situación de Cuba con Internet.

-¡Que volá chama!, ya estoy en occidente.”

Hace unos meses le pedí a Erasmo que me lo presentará cuando viniera a Cuba (el Lusimi vive en España) más el momento no se concretó, por tanto, no me queda más remedio que seguir insistiendo en conocer a este singular comentarista de Havanatimes.