Robo en el aeropuerto de La Habana

HAVANA TIMES – Durante su último viaje a Cuba en diciembre de 2018, Peter B. Kappelmann, un jubilado y adulto mayor quien desde el año 2007 ha viajado a Cuba con regularidad, fue objeto de un robo de cantidad considerable en el Terminal 3 del Aeropuerto Jose Martí de La Habana.

A continuación, publicamos su declaración:

 

Declaración de los hechos

El domingo 16 de diciembre de 2018, estaba a punto de salir del aeropuerto internacional de La Habana – por la Terminal #3.

Alrededor de las 3:00 de la tarde, mi asistente de silla de ruedas me llevó a través de la oficina de Inmigración y luego a la sección de Control de Seguridad. Él pasó por alto todas las colas de espera y me puso en la silla de ruedas, al lado izquierdo en la sala de proyección.

Allí, todos los artículos fueron depositados en dos bandejas, incluyendo todos mis documentos personales, así como lo que llevaba en mis bolsillos: pasaporte más 3 sobres blancos que contenían efectivo y una billetera dentro de los bolsillos de mi camisa especial de viaje.

Luego, el asistente se dirigió al extremo derecho del area de inspección, aproximadamente a 30 metros de distancia, pasando por todas los demás pasajeros en espera. Después de unos 10 minutos, volvió a llevarme al otro lado donde todos los artículos me esperaban mientras yo permanecía sentado en la silla de ruedas.

Me acomodé la ropa de manera apresurada, pues muchos pasajeros estaban empujando a mi lado. Fui conducido hasta mi puerta y, después de darle una propina, se fue.

Pasados unos minutos tuve que ir al baño y fue cuando me percaté que los tres sobres con la suma total de tres mil 400 euros había desaparecido.

Me dirigí tan rápido como me fue posible, con mi rodilla dañada, a la oficina de Control de Seguridad. El oficial fue totalmente DESINTERESADO y NEGATIVO y me preguntó si eso realmente había sucedido!!!!!!.

Durante una hora estuve sentado frente a la oficina, interrogando a tres oficiales de seguridad diferentes, quienes se encogieron de hombros y se alejaron. Uno dijo que no apareció nada en el video. Pero no me lo mostraron.

La persona señaló al otro lado del pasillo, a la oficina de la policía. Me acerqué e informé de todo otra vez. Me quedé parado en la puerta de la pequeña oficina hasta que tuve que sentarme a la vuelta de la esquina.

Nuevamente no pasó nada y me dijeron en varias ocasiones que esperara. Después de media hora tuve que salir para no perder mi vuelo internacional.

Resumen

No se me mostró ninguna grabación.

NO se realizó ni se redactó ningún informe.

NO se realizaron preguntas o interrogatorio alguno al asistente de silla de ruedas.

CONCLUSIÓN

Hay una cultura organizada en el aeropuerto de La Habana, por parte de los inspectores de seguridad, para robar a los viajeros internacionales, conociendo que tenemos que abordar vuelos para salir de Cuba.

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Kappelmann nos dijo: “Conozco bien la vida de la capital, ya que viví en La Habana, en la zona de Malecón, durante todo el 2016. Tengo muchos conocidos en la Isla y también una secretaria de habla inglesa que me asiste en todas las visitas que realizo. He comprado arte cubano, los cuales forman la base de mi colección de arte.”

A pesar de lo sucedido, “tengo la intención de regresar a La Habana al menos dos veces este año.”