Cuba tiene alto potencial, sólo necesita un shock productivo

Por Pilar Montes

HAVANA TIMES — La situación geográfica de Cuba, cercana a Estados Unidos y México, sus recursos humanos altamente calificados y los nuevos incentivos para la inversión extranjera hacen de Cuba un mercado atractivo, afirmó el doctor en Ciencias Económicas, Juan Triana Cordoví.

La inversión de capital foráneo hasta hace poco vista por el gobierno cubano como complemento de los esfuerzos internos para el desarrollo, cambió para convertirse en elemento esencial para el funcionamiento de la economía de la Isla.

Hablándole a una de las muchas misiones empresariales que visitan Cuba por estos días, cinco apenas en el mes de abril, Triana afirmó que en 2014 puede decirse que el país tocó fondo, con 1.3 por ciento de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB).

En el presente 2015, para el cual la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) pronostica un promedio de crecimiento del PIB para la región de apenas el uno por ciento, Cuba va encaminada a cumplir su objetivo de 4 por ciento.

Fuera del secreto estatal

A continuación, Triana aportó cifras no divulgadas por fuentes oficiales, bajo el criterio erróneo que no es necesario sean del dominio público. Sólo algunas son recogidas por la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI).

El salario promedio del cubano es equivalente a unos 20-25 USD, aunque recibe servicios públicos subsidiados como la educación, la atención médica y una pequeña cantidad de alimentos.

Entretanto, los incrementos recibidos en los ingresos están lejos de satisfacer las necesidades básicas, puesto que los precios han subido más que los salarios.

Desde 1994, señaló Triana, Cuba ha crecido sistemáticamente todos los años, aunque lejos de lo que necesita para desarrollarse.

El académico añadió que Cuba debe aumentar la tasa de crecimiento por encima del 20 por ciento, contexto en que la inversión externa se convierte en un elemento decisivo para la economía del país.

De acuerdo con la consultoría con base en Miami, Havana Consulting, citada por Triana, esa fuente calcula el crecimiento en el presente año en el 3.5 por ciento, cercana a los pronósticos de La Habana.

Las presiones financieras derivadas de tener que importar unos cinco mil millones de dólares en combustibles y alimentos, hacen depender los planes futuros en el ingreso de dinero fresco por vía de la inversión externa y las exportaciones.

Los renglones principales del país, indicó el economista, son la biotecnología, la exportación de servicios, el turismo, la producción nacional de petróleo (que cubre casi la mitad del consumo interno de combustible, el resto procedente de los acuerdos suscritos con Venezuela).

En el primer trimestre de 2015 sólo el turismo creció en más del 20 por ciento, a lo que ha contribuido el aumento de visitantes norteamericanos.

Triana recordó que hay más de un millón de cubanos residentes en Estados Unidos que, según Havana Consulting, mandaron remesas en 2014 por unos tres mil millones de dólares.

Las exportaciones de bienes y servicios representaron en 2014, 18.593 millones de dólares y las importaciones sumaron 16.602 millones.

La deuda externa cubana es calculada por The Economist Intelligence Unit (EIU) en 25.579 millones de dólares.

El servicio de la deuda, según el gobierno, se estimó en cinco mil millones de dólares en 2014. En este año, Cuba debe erogar el doble en pagos del servicio de deuda, lo que la pondrá en una mejor situación para atraer créditos externos.

Las reservas financieras del país se declararon en 10 mil millones de dólares según fuentes oficiales, pero no divulgadas por los medios masivos de comunicación.

El pago de esas obligaciones, representa según el académico, 4 o 5 meses de importaciones del país. Lo que no dijo, pero se deduce, es que las compras de alimentos en el exterior podrían reducirse.

Cuba ha renegociado con México y España sus respectivas obligaciones externas y ahora realiza su renegociación de deuda con los acreedores del Club de París.

Por otra parte, afirmó Triana, el país presenta en la actualidad una matriz exportadora mucho más diversificada que en 1998 y con una mayor eficiencia.

Donde radica la fuerza productiva

Todo esto, con una población cuyo 11.1 por ciento tiene nivel universitario y que representa el 19 por ciento de la fuerza laboral. Los trabajadores empleados por el Estado suman poco más de cinco millones y 1.5 millones los no-estatales. La tasa oficial de desocupación es del 3.3 por ciento.

Dicho esto, es preciso añadir que los nuevos métodos de dirección empresarial, tanto estatales como cooperativos, están dirigidos al pago por resultados. Ya empiezan muchos trabajadores industriales a recibir el doble de un salario promedio.

En las labores agrícolas también se oyen con más frecuencia expresiones de satisfacción por ingresos mensuales superiores a los mil pesos, además de distribución de utilidades al finalizar el año entre los cooperativistas.

El sector con mayor empuje y que ya supera el medio millón son los trabajadores por cuenta propia o particulares, que están sentando ejemplos de calidad, novedad y buen trato al público.

Sin embargo, la productividad en muchos casos alentada por el incremento salarial, no logra el alza necesaria debido al estado obsoleto de maquinarias y procesos tecnológicos que son precisos modernizar.

De ahí que el conocido economista se refiriera a la necesidad de un “shock” productivo, sobre todo financiado por inversiones directas que permitan actualizar procesos industriales con maquinarias y nuevas tecnologías.

Triana recordó que también crece el atractivo de Cuba para la inversión extranjera por el espacio político alcanzado por la Isla entre los países latinoamericanos y caribeños, lo que cuenta a la hora de los empresarios europeos querer entrar con más fuerza en el mercado regional.

El deshielo en las relaciones con Estados Unidos es también un incentivo a tener en cuenta, aunque el proceso de normalización será prolongado.

Cuba necesita un shock productivo, dijo Triana en conclusión, en la planta industrial, el transporte, las telecomunicaciones y las nuevas tecnologías. El alto potencial de crecimiento está ahí.