La escuela en Cuba que me perdí

Kabir Vega Castellanos

HAVANA TIMES — Hace una semana me visitó uno de mis compañeros del pre-universitario. Me puso al día de lo que ha estado sucediendo en mi antigua aula durante mi ausencia.

Me contó que algunos conocidos ya no estaban allí y otros detalles sin importancia. Pero sí me asombraron dos cosas:

Que uno de los estudiantes llega cada día con dos horas de retraso, pide permiso para entrar, deja su mochila donde no caben ni libros porque es casi una miniatura y con la misma sale del aula.

Los profesores no parecieron perturbarse mucho por esto y con el tiempo se adaptaron a su rutina. Así de simple, nadie le llama la atención y el que no reciba una clase no impide que  tenga tanto derecho a prueba como los demás.

Me pareció raro porque cuando yo estaba en décimo la dirección del pre era muy exigente con la asistencia.

Pero la peor de las novedades está relacionada con un nuevo profesor de química.

Por diversos indicios, los alumnos empezaron a sospechar que éste se hacía el sordo, así que planearon descubrir si su sordera era real o no.

Un alumno se paró delante de él, dándole conversación mientras otro se ubicó sigilosamente detrás y le dijo al oído: “Sordo, sordo, sordo…”

En vista de que el profesor no reaccionaba, el chiquillo se envalentonó y comenzó a gritar: “ ¡¡Sordo!!” con todas sus fuerzas y sin parar. Uno de los encargados de cuidar la escuela, que se encontraba a unas cinco aulas de distancia, apareció de repente y puso fin al escándalo.

Ante el terrible hallazgo, casi todos los alumnos se aprovecharon sin siquiera dudar. Cuando hay que exponer un trabajo de clase, los que han olvidado su parte simplemente mueven la boca fingiendo que exponen los conocimientos. No obstante, la audacia no terminó allí: los más crueles, durante la exposición incluso se burlan del profesor y lo insultan.

Porque la enseñanza está basada en la apariencia, a la dirección del pre universitario no le importan tardanzas, ausencias, o la vejación de un profesor. Ni siquiera la violencia entre alumnos.

Recuerdo que cuando yo estaba en décimo grado dos muchachos se agredieron y en la bronca uno sacó un cuchillo. Ninguno de los dos fue expulsado, o siquiera sancionado por indisciplina.

Pero si un varón tiene el pelo un centímetro más largo de lo que exigen, no importa si no tiene ausencias injustificadas, si es respetuoso, si se esfuerza por aprobar. A ése sí se le puede negar el derecho al estudio.

Viendo tanta hipocresía no me queda duda de que las escuelas en Cuba (al menos las que he conocido) no tienen mucho que enseñar. Si acaso cómo ser peores seres humanos.

Articulos recientes:

  • Foto del dia
  • Mundo
  • Noticias

Lake Sabrina, California, EUA – Foto del día

Jodie Newell de Estados Unidos tomó nuestra foto del día: "Lake Sabrina" en California, EUA.

  • Cuba
  • Opinión

Discurso deshumanizante y represión en Cuba

En Cuba, el discurso oficial de intolerancia se entrelaza directamente con la deshumanización de aquellos…

  • Nicaragua
  • Noticias

Una caravana cultural para los nicas en Estados Unidos

El grupo folclórico Malinche se unió a Carlos Mejía Godoy y TrovAzul para presentaciones en…

Con el motivo de mejorar el uso y la navegación, Havana Times utiliza cookies.