Cuba, el país de los eventos

“Eventos van, eventos vienen, son solamente eso, eventos” (Sacerdote Jesuita en Cuba)

Vicente Morín Aguado

HAVANA TIMES — La frase pertenece al primero de los encuentros auspiciados por el Centro Loyola, cuyo fórum se planteó un debate sobre la impronta del papa Francisco en Cuba y los Estados Unidos. Esperamos la tercera reunión, suspendida repentinamente sin explicación alguna. Nos quedaron los frutos iniciales, entre ellos, la citada reflexión. Nadie nos gana en cónclaves nacionales y/o internacionales por Km2 y cantidad de habitantes.

Tratándose de nuestro país, decir cónclave viene a ser lo justo, recordando la acepción originaria de esta palabra. Según la Real Academia de la Lengua (DRAE): “En la Iglesia católica, reunión de los cardenales y lugar donde se juntan y encierran para elegir un nuevo Papa.” © Espasa Calpe, S.A.

Lo interesante no es la elección papal, sino que se trata de un encierro, los reunidos quedan bajo llave -clave en latín- hasta que cumplen el objetivo prefijado por la reunión. Cualquier similitud respecto a los cientos de eventos celebrados anualmente en Cuba NO ES pura coincidencia.

Vayamos de los conceptos a la realidad, un buen ejemplo, la recién finalizada Feria de La Habana, conocida bajo las siglas FIHAV, ¿qué nos deparó en concreto? El economista Fernando Dámaso ofrece esta conclusión:

“Llama la atención que, como resultado de las 32 ediciones anteriores de la Feria, poco se haya publicado sobre la materialización de las cartas de intenciones o de los acuerdos comerciales firmados, por lo que parece que nunca llegaron a ejecutarse. Sería saludable para el país que, en esta 33 edición, el fenómeno no se repitiera y no solo quedaran, como cada año, las cifras de participantes sin resultados concretos.” (Diario de Cuba, noviembre 10 de 2015)

En los iluminados salones de FIHAV se habló de posibles negocios en el sector Agroindustrial. Meses atrás los agricultores cubanos organizados en la Asociación Nacionales de Agricultores Pequeños (ANAP), celebraron su último congreso, clausurado por el segundo secretario del Partido Comunista, Machado Ventura, quien se ocupa directamente de la agricultura nacional en su conjunto.

De la fecha acá se agudizó la crisis de la masa ganadera, la zafra azucarera quedó una vez más por debajo de lo programado, mientras la Oficina Nacional de Estadísticas, confirmaba el indetenible aumento de los precios alimentarios.

De congresos y conferencias podríamos ejemplificar tanto, que haríamos un volumen tan grueso como la Biblia, usando sus finísimas hojas. Precisamente desde el seno de la Iglesia Católica cubana claman ahora por obtener los resultados que presuponen tres visitas papales en menos de 20 años.

Al reclamar los espacios hasta ahora negados a la institución, el último número de la revista de la arquidiócesis de La Habana, Palabra Nueva, subraya el planteamiento objeto de nuestro comentario: “Que la visita del papa Francisco a Cuba no sea otro paréntesis en la vida nacional.”

Marchamos hacia el congreso de los congresos, el número Siete del Partido Comunista de Cuba, cuyo proceso asambleario se desarrolla ahora en las provincias. Sobran los aplausos y las manos alzadas, están por verse los resultados para romper el hechizo de los eventos, práctica política que hasta hoy corroe como un cáncer la vida nacional.