Autor de delitos sexuales infantiles en Cuba castigado en Canadá

HAVANA TIMES — Un tribunal canadiense escuchó una declaración de culpable el viernes de James McTurk, de 78 años, un empleado de correos jubilado, acusado por la policía de Toronto por delitos de turismo sexual infantil cometidos en Cuba. Ahora se enfrenta a una posible sentencia de cadena perpetua.

Canadá es el principal mercado de turismo para Cuba, y este es el primer caso en que un canadiense es condenado por un delito sexual cometido en la isla.

“Después que un abogado de la fiscalía terminó de recitar la lista de delitos sexuales grotescos cometido por James McTurk contra niñas cubanas, hasta de 3 años de edad, el hombre fue esposado y llevado de vuelta a la cárcel, donde podría pasar el resto de su vida”, informó thestar.com.

“El viernes, McTurk se convirtió en el primer canadiense condenado por delitos sexuales cometidos contra los niños/as en Cuba, declarándose culpable de un cargo de hacer pornografía infantil, otra de importación de pornografía infantil, tres cargos de interferencia sexual con niñas jóvenes con su boca, las manos y el pene y un cargo final de invitación para el contacto sexual “, añade el sitio web.

Tras la investigación, el ministro de Seguridad Pública Vic Toews reconoció una deficiencia en la ley que requiere una reforma, señala thestar.

“Estamos consultando con expertos en este campo y en el terreno y trabajando hacia la prevención de que los traficantes y delincuentes puedan viajar al extranjero,” dijo Julie Carmichael, la portavoz de Toews, en un comunicado el viernes. “Nos hemos comprometido a poner fin a la explotación sexual de los niños/as, no importa dónde se puede producir.”

Thestar.com señaló que McTurk había sido condenado dos veces por pornografía infantil en 1995 y 1998. A pesar de que él se encuentra en el registro de delincuentes sexual, era libre de viajar al extranjero. “El tribunal fue informado de que hizo 31 viajes a Cuba entre 2009 y su detención en julio de 2012”, en el Aeropuerto Internacional Pearson de Toronto a su regreso de la isla.