Artista propone una 13 Bienal de La Habana no oficial

Yanelis Nuñez Leyva

HAVANA TIMES – “El Ministerio de Cultura, el Consejo Nacional de las Artes Plásticas (CNAP) y el Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam han decidido posponer la celebración de la 13 Bienal de La Habana como consecuencia de la situación económica del país tras el paso del huracán Irma”. Así comienza la breve nota de prensa que difunde desde el 22 de septiembre de 2017 la dirección de comunicación del CNAP a través de correos electrónicos personales.

La suspensión de la Bienal que se efectuaría a partir del 5 de octubre hasta el 5 de noviembre de 2018, ha alarmado a muchos artistas, de fuera y dentro de Cuba, si se tiene en cuenta que es el evento más esperado de las artes visuales del país. Momento en que coleccionistas, galeristas, curadores, pasan por la isla a contabilizar las producciones recientes y por ende numerosos creadores pasan largos periodos de tiempo trabajando solamente para este gran evento.

Ante esta noticia algunas interrogantes surgen: ¿Tiene el Estado Cubano fondos guardados para casos de desastre de la magnitud de Irma; o el hecho que recurra a todo el presupuesto de sus instituciones no denota otra cosa que la profunda crisis económica en que se encuentra el país?

O si se mira desde otro punto de vista, quizás el gobierno no desea que activistas y artistas – reunidos todos en un mismo espacio – tengan el terreno propicio para la crítica abierta con todos los medios internacionales a su disposición por la propia dinámica de promoción del evento.

Luis Manuel Otero Alcántara, ofuscado como muchos con esta situación, ya ha lanzado su convocatoria en la red social de facebook para comandar la realización de esta Bienal, con la participación y colaboración de todos los artistas interesados.

La iniciativa no se trata de un acto de insensibilidad con relación a los afectados por el Huracán Irma, sino más bien otro gesto de cuestionamiento al sistema por su mal funcionamiento y su oportunismo, explica Otero.

Confluencias, redes y transversalidades constituía el tópico de la 13 Bienal, y cuando la directora del Lam, Dannys Montes de Oca, explicaba en abril las peculiaridades del mismo, resaltaba el tema de la descentralización del papel del curador y la importancia de una crítica a la institucionalidad del arte.  Al parecer, a tono con esta prerrogativa, la Bienal de la Habana, promete llevarse a cabo.