Un crowdfunding creativo desde la maldita circunstancia

Lynn Cruz

HAVANA TIMES – La plataforma verkami se ha hecho muy popular entre los artistas independientes cubanos. La razón es porque el sitio es español y no corre el riesgo de otros espacios como Indiegogo o Kickstarter que por ser estadounidenses, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos podría congelar los fondos, tratándose de un proyecto gestado dentro de Cuba, tal como le sucedió al cineasta Miguel Coyula con el filme Corazón Azul.

Hacer un crowfunding es básicamente a lo que los cubanos denominamos vaquita o ponina. Durante 40 días los interesados podrán realizar sus donaciones en la página que tenemos asignada dentro del verkami, para completar la cifra que pedimos, y terminar la producción de la obra de teatro Patriotismo 36-77.

Comenzamos el 16 de julio. La particularidad de esta plataforma es que, si no recaudas la cifra pedida, entonces lo pierdes todo. Por supuesto, en ese caso, el dinero será devuelto a los donantes, que son catalogados como mecenas.

Viendo que nosotros avanzamos más lento que la mayoría de los proyectos, muchas inquietudes me rondan. Por ejemplo, uno de los destacados en verkami 2017, fue el del fotógrafo Paco Gómez y el expedicionario Hilo Moreno.  Se propusieron la primera exploración de la Antártida a través de whatsapp. Y lo consiguieron en solo 40 días, lograron recaudar 22.000 euros para su proyecto. 

¿Cómo hacer realidad el sueño de un cubano que vive en Cuba?

En verdad eso es lo que estamos proponiendo, la realización de una ilusión. Es obvio que tenemos que encontrar a las personas afines a esa aspiración y he ahí el reto.

A la larga he notado cuánto nos afecta el sistema político y económico cubano, sobre todo, cuando esas palabras se reúnen en una sola frase: “Sueños y aspiraciones”.

La ingeniería genética en Cuba es descapitalizarnos. Los cubanos simplemente no tenemos crédito, porque no tenemos banco. La credibilidad en el mundo de hoy está regida por cifras acumuladas en cuentas.

¿Cómo confiar en un individuo de segunda, a quien su gobierno le asigna un salario de 30 dólares, por ser un profesional de las ciencias, las artes o las letras?

He estado desde acá junto a los actores Juliana Rabelo, Luis Trápaga, con mi amiga Tereluna Vimo, quien colabora desde Madrid, pues otro de los problemas que enfrentamos es el acceso a la Internet.

Si bien han aumentado los lugares de enlace a las redes sociales dentro de la Isla, enfrentamos la dificultad no solo por la lentitud de la conexión, sino por el precio de esta.

Todos trabajamos en función de una sola idea. A la larga nos dimos cuenta de que el premio mayor a nuestro esfuerzo no será encontrar a un mecenas que aporte una gran suma de dinero (aunque también podría ser), pero nos gustaría recuperar el carácter de rito, que ha perdido nuestro teatro.

Descubrimos que podemos hacer un teatro cubano para el mundo, gracias a la Internet. Sensibilizar a la audiencia a través de un enfoque que parte de la desesperación.

Desde la conciencia de que hemos realizado acciones lo mismo en arte o en defensa de nuestros derechos civiles, que nos han traído consecuencias. Entonces por qué no empezar por nuestros propios testimonios.  Así nació Patriotismo 36-77.

En caso de que gane el proyecto y logremos reunir a la mayor cantidad de mecenas, desde nuestro canal de vimeo, convocaríamos a todos a ver la obra a la misma hora. La subtitularíamos al inglés, pues queremos que cualquier persona, en cualquier parte del mundo participe.

Propondremos horarios que se ajusten tanto a oriente como occidente. Las personas podrán hacer comentarios por las redes sociales, escribir textos, realizar un análisis crítico que nos ayude a mejorar nuestro arte.

La copia de la obra será en HD y el camarógrafo seguirá a los actores durante toda la función, para que todos los que la vean grabada, puedan disfrutar de una filmación pensada más para y desde el lenguaje cinematográfico.

Por otro lado, la audiencia que asista a la función en vivo verá una obra de teatro, un performance y al mismo tiempo el rodaje de una película.