Jorge Milanés
La situación económica que se avizora, así como los límites y consecuencias del llamado Periodo Especial de los noventa, hace que muchas personas en Cuba hoy en día no quieran ser tomados por sorpresa y acudan a diversas estrategias para solucionar sus problemas económicos.
De un tiempo a esta parte, el espacio dentro de los ómnibus, articulados para los coches de bebés o personas con necesidades especiales, es utilizado frecuentemente por comerciantes para transportar sacos con mercancía en horarios de la mañana.
El chofer, en estos casos, detiene el ómnibus, y el individuo, ayudado por algún pasajero, coloca con gran rapidez los sacos de mercancía en el espacio mencionado. “Dale chofe…” grita, e inmediatamente avanza entre los pasajeros dejando ver el billete de veinte pesos que lleva en la mano.
No es una situación generalizada, pero ya hay cubanos que buscan solucionar el problema de la transportación de esta manera que, aunque ilegal, por utilizar el espacio de las personas con necesidades especiales, es más económica que alquilar un auto o una camioneta.
“Esa también es una necesidad, por lo que se ve, dentro de poco no habrá qué cargar, ni transporte”, dice un pasajero en voz baja refiriéndose al comerciante, mientras a su alrededor el resto de los pasajeros se muestra un poco más reflexivo.
Me llama la atención cómo la amenaza de un nuevo Periodo Especial comienza afectando primero a los más débiles, las llamadas “personas con necesidades especiales”. Los comerciantes por su parte, tal vez no tan en desventaja como ellas, sienten que deben ocuparse ellos mismos de sus necesidades, pues si no, ¿quién lo va a hacer?
Se intenta suicidar en prisión Fray Pascual Claro Valladares al conocer su sentencia, de 10…
Nada nuevo, pero resulta que la palabra se ha puesto de moda, y esta semana…
Sin electricidad y sin acceso a la red de redes, así pasan los habitantes de…
Con el motivo de mejorar el uso y la navegación, Havana Times utiliza cookies.