Trueque por intimidad

Por Irina Pino

Foto: Juan Suárez

HAVANA TIMES – La situación del empleo está difícil en Cuba, algunos conservan sus puestos, otros se han tenido que jubilar o permanecen en sus casas, cobrando el 60 % de su salario. Se sabe que la mayoría de los negocios privados han cerrado por la ausencia de turismo.

Tal es el caso de mi amiga Keyli, que era cocinera en un hostal. Siempre de buen humor, presumía de su estatus, le iba muy bien, porque ni siquiera tenía que coger transporte, pues estaba en su barrio.

Su hijo, que se dedicaba al arte del tatuaje, ha perdido parte de su clientela, y tuvo que recurrir a su antiguo empleo de camillero del hospital Calixto García.

Después de varios meses desempleada, actualmente se ocupa de la limpieza de dos casas. El salario es de 7 CUC. Si incluye baños, son 10. Pero todo depende de una llamada de sus empleadores, o sea, a veces solo hace una limpieza a la semana.

Este empleo no cubre todas sus necesidades. El salario de su hijo es bajo.

Proposición indecente

En uno de esos apartamentos conoció a un hombre mayor que celebraba su buena figura: que si tenía tremendo cuerpo, que si era muy atractiva…

Escuchaba aquellos piropos con frecuencia, hasta que finalmente, el tipo le propuso tener sexo a cambio de regalos.

Su primera reacción fue mandarlo al carajo. Ella tiene 37 años, y él casi 70, le parecía asqueroso acostarse con él.

Después de analizar sus pros y sus contras, comprendió que esta relación tendría sus ventajas. Por otro lado, no existía ningún impedimento, ya que ella no tiene pareja fija.

Se cansó de levantarse de madrugada en sus días libres, para marcar en colas y poder resolver necesidades básicas. También de comprar productos en bolsa negra.

Decidió aceptar la propuesta. Es conveniente para ambos, él disfruta de su cuerpo, y ella recibe mercancías. Para ella, esto no es prostituirse, porque no hay dinero de por medio.

Me cuenta que él viene cargado con toda clase de provisiones, viandas y frutas, pan, arroz, yogurt, frascos de puré de tomate, a veces frijoles.

Anoche, cuando hable con ella por Watsaap, me dijo: hoy mi casa está de fiesta: el “Amigo que trae” se apareció con detergente, champú y desodorante.

Recuerdo cuando Keily se quejaba de que sus parejas no la ayudaban con sus problemas. Ahora tener sexo con una persona que no le gusta ni un poquito le parece la cosa más natural del mundo.

Lea más del diario de Irina Pino aquí.

Articulos recientes:

  • Cuba
  • Reportajes
  • Segmentos

15 años de prisión a la joven que transmitió las protestas

Se intenta suicidar en prisión Fray Pascual Claro Valladares al conocer su sentencia, de 10…

  • Cuba
  • Opinión
  • Segmentos

“Distorsiones” de moda en Cuba

Nada nuevo, pero resulta que la palabra se ha puesto de moda, y esta semana…

  • Cuba
  • Reportajes
  • Segmentos

San Antonio de los Baños, donde el humor dio paso al dolor

Sin electricidad y sin acceso a la red de redes, así pasan los habitantes de…

Con el motivo de mejorar el uso y la navegación, Havana Times utiliza cookies.