Todos somos Cuba

By Esther

HAVANA TIMES – Vuelvo a escuchar con asombro el uso de un lenguaje agresivo para nombrar, en las redes, a los compatriotas que ejercen su derecho a tener una opinión diferente.  Anexionistas son ahora los que osan tener una visión crítica o diferente de la realidad.

Nos hemos acostumbrado durante décadas a no ejercer nuestro derecho a ser escuchados. Tal vez por eso cometemos una y otra vez los mismos errores.

En estos meses la locución belicista no ha dejado de escucharse y leerse en los medios de comunicación. Los coleros y revendedores han recibido epítetos que van desde enfermedad social hasta desalmados enemigos públicos.

Todos estos calificativos agresivos me han retrotraído a la amarga y dolorosa década de los 80. Calificativos muy parecidos contra compatriotas que decidieron abandonar el país por razones económicas y fueron tildados de lacras sociales, traidores y escorias.

Olvidar es repetir

No debemos olvidar que tal instigación provocó actos de violencia extrema, por parte de un grupo mayoritario de la población contra hombres, mujeres, niños, adolecentes y ancianos.    

Es increíble que el olvido vuelva a carenar una vez más en nuestras costas.  Cómo es posible que vuelvan a cometerse los mismos errores, cuando los supuestos enemigos de ayer son los que hoy mantienen a muchas familias cubanas y su dinero alivia a nuestra economía. Cómo olvidar el dolor de miles de familias rotas por imposiciones ideológicas.   

Los cubanos no solo somos los buenitos, los que siguen las reglas, los que miran a otra parte, los que no protestan. Todos somos Cuba y aun en esa diversidad somos revolucionarios, amamos a nuestra patria y pensamos con ella.  

Es absurdo y malintencionado caldear los ánimos y enfrentarnos los unos contra los otros, cuando deberíamos estar todos juntos a favor de la patria.

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