Ana Siú

La Mulán que nunca regresó

Crecí en Jinotepe, una pequeña ciudad a 45 minutos de Managua. Vivía en una casa muy grande con mi abuela materna, papá, mamá, cuatro hermanxs, dos gatos, una lora y cuatro perros. Una casa donde no existía el silencio. Sin embargo, las tardes de mi infancia recuerdo pasarlas en la casa de mi abuela Mamarrú y mi abuelo Papa Armando.

Una nicaragüense en el exilio: “Mi depresión tras la crisis”

Antes de contarles mi experiencia con terapia y medicamentos, me parece adecuado narrarles un poco acerca de mi niñez y relación con la salud mental. Yo crecí en una familia grande, donde los trastornos mentales eran el principal problema en casa, ya fuera por los episodios maníacos de unx o por la depresión de otrx. Para mí, los psiquiatras y medicamentos han sido normales desde que tengo memoria.