Un curso acelerado de capitalismo básico a los cubanos

En el programa de La Mesa Redonda

Imagen de archivo de un trabajador en la Empresa Azucarera de Ciego de Ávila. (Invasor)


Un festival de nuevos términos en el discurso oficial: generación de riqueza, despidos, salarios libres, desburocratización

Por 14ymedio

HAVANA TIMES – Los cubanos que anoche sintonizaron la televisión estatal para ver la Mesa Redonda pudieron asistir en directo a una enmienda a la totalidad de las políticas económicas socialistas que Cuba ha seguido en los últimos 65 años. No sorprende tanto el discurso, ya que los ciudadanos están viviendo en sus carnes la reconversión del sistema de la Isla hacia un capitalismo de oligarquías, como el reconocimiento público de que lo hecho durante décadas no funciona.

La académica y profesora Ileana Díaz Fernández, invitada este miércoles al programa para hablar de la empresa estatal, puso sobre la mesa conceptos hasta hace poco prácticamente prohibidos. La generación de riqueza, los despidos, los salarios libres, la quiebra de empresas, la desburocratización e, incluso, los efectos nocivos de los precios topados.

«El mecanismo que existe en el país es que cuando hay un problema hay que tocarlo con la mano. Cuando usted tiene que estar tocando con la mano cada vez que hay un problema, resuelve uno por aquí y le sale otro por acá», comenzó, para explicar que se ha distorsionado la economía, especialmente la micro, de cuyos problemas responsabilizó al control de precios.

«Cuando usted empieza administrativamente a decir no puede subir por aquí y tiene que bajar por aquí, y empieza a establecer un conjunto de elementos, de escalas salariales o lo que fuere, empieza a interrumpir el proceso lógico y normal que debe mantenerse y debe ser un círculo virtuoso para la empresa», argumentó. La especialista, que considera que es el empresario quien debe tomar las decisiones, enunció lo que hasta ahora era un anatema.

«No le tenemos que tener miedo al mercado (…) Tiene que acceder al mercado y el mercado empieza a ver señales: usted tiene el dinero para acceder, podrá comprar en el mercado; usted no tiene el dinero, usted no podrá entrar. Si es más eficiente como empresa, tendrá mejores condiciones en ese acceso», añadió.

Sin detener la senda que había cogido, continuó hablando de una relativa libertad salarial. «¿Y si yo le quiero aumentar más el salario a mis trabajadores? Le tenemos miedo a eso, ¿qué pasa?», dijo, reconociendo, no obstante, que esta situación tiene unos límites, por la subida de precios que comporta. Díaz Fernández continuó entonces con otro tema que ha supuesto tal tabú en Cuba que existen conceptos especiales para llamar a los trabajadores despedidos «interruptos» o en «proceso de disponibilidad».

«El empresario tiene que tener también decisiones sobre si de alguna manera le sobra personal, porque es probable que le pueda suceder, y por supuesto hay que proteger a ese personal, nadie lo excluye», argumentaba, cuando, crecida, expresó: «Tienes que lograr que la empresa cree riqueza y que cree riquezas rentablemente con un porcentaje mayor de rentabilidad ¿Por qué? Porque en la medida en que usted cree riqueza no solo satisface las necesidades de la población sino también las del Estado, pues va a pagar más impuestos y tendrá mayores aportes al presupuesto del Estado», repuso.

Según esta misma lógica, consideró que es perfectamente admisible que una empresa desaparezca. «¿Puedes llegar a quebrar? Sí, porque unas empresas nacen y otras mueren. En la vida humana pasa y en las empresas igual», concluyó.

En medio de toda esta introducción ideológica al capitalismo, la profesora explicó finalmente una medida práctica que la futura Ley de Empresas –motivo del asunto a tratar en el programa– introducirá y es la clasificación de estas en tres tipos.

La norma preverá un primer grupo, compuesto por cerca de mil empresas, con autonomía –»la Constitución de la República dice que la empresa estatal es autónoma y en la realidad no lo es completamente, pues muchas veces tiene que estar esperando un sinnúmero de autorizaciones», agregó–para la gestión y la búsqueda de mercados, aunque tendrá que rendir resultados.

Otro será el de las subsidiadas, fundamentalmente las que están vinculadas con la canasta básica. Por último, los monopolios, sectores estratégicos que se dedican especialmente a los suministros, como el agua, la luz, el gas o los combustibles, entre otras.

Díaz Fernández quiso dejar claro que los cambios serán graduales y que primero habrá que crear mercados necesarios, entre ellos el de insumos o el laboral, aunque especialmente el de divisas. Eso rebajó las expectativas de los espectadores, pero el cambio discursivo fue digno de mención. «Es inminente cambiar esas reglas del juego. Porque no vale solo un programa de estabilización macroeconómica si no hacemos un programa de transformación estructural de la economía», enfatizó.

A su intervención la había precedido la de Johana Odriozola Guitart, viceministra de Economía y Planificación, que habló de pasos que precedieron a la futura norma –como la creación de las mipymes–, reivindicó la transición a una economía menos administrativa y más financiera y dejó algunos datos sobre la empresa estatal, protagonista de la noche.

Actualmente, hay 2.417 de las que 1.872 son las «tradicionales» y el resto son las de nueva creación: mipymes estatales (116) y empresas filiales (159). La viceministra dijo que las empresas estatales aportan el 92% de las ventas, el 75% de las exportaciones y el 87% del Producto Interior Bruto (PIB), además de emplear a 1.431.000 trabajadores (frente a los 200.000 de las privadas).

La desproporción, generada por décadas de exclusividad, no las convierte en más importantes, defendió Odriozola Guitart, pero sí explica que urja tomar decisiones, por el peso que suponen en la economía nacional.

Sorprendentemente, la situación –en lo que a pérdidas se refiere– ha mejorado en los dos últimos años, ya que hay 278 empresas con pérdidas, frente a las 500 de 2021. En cualquier caso, indicó que en 309 entidades la rentabilidad sobre ventas netas es inferior a 2 centavos. «No están en pérdida pero viven realmente en una estática milagrosa y son muy susceptibles a cualquier incremento de los costos».

En la Mesa Redonda participó también el director de Laboratorios Aica –perteneciente a BioCubaFarma–, Antonio Vallín García, que habló largo y tendido de las dificultades de trabajar a nivel internacional, elogió algunas de las medidas tomadas hasta la fecha y pidió más avances, entre ellos la creación de entidades reguladoras profesionales, en vez de ministeriales. «Yo pienso que lo primero que tenemos que hacer es desregular», dijo.

En este contexto, el ministerio prevé lanzar la nueva ley para este año, y aunque la viceministra señaló que no será suficiente, la sesión de ayer dejó claro que el lenguaje, al menos, se mueve.

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One thought on “Un curso acelerado de capitalismo básico a los cubanos

  • Parecía este artículo un paso en la dirección correcta, pero, el periódico granma se encargó de poner los puntos sobre las íes, al escribir, que según manifestó el organizador del pcc, Roberto Morales Ojeda, la zafra azucarera venidera «la digirirá el partido». Cuándo terminarán de comer excreta?

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