Toca fondo el voleibol cubano

Por Ronal Quiñones

Equipo cubana de voleibol. Foto/archivo: cubahora.cu
Equipo cubana de voleibol. Foto/archivo: cubahora.cu

HAVANA TIMES — Luego de obtener en enero pasado el boleto a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro-2016, parecía que el voleibol masculino cubano entraba en una etapa de consolidación, con una adecuada mezcla de figuras establecidas y otras bien jóvenes.

Sin embargo, los sucesos de Tampere, comentados ya en estas páginas, dieron al traste con la posibilidad de un nuevo repunte, que se convirtió en otro retroceso. Si a esto se suma que en el sexo femenino hace más de una década que no se obtiene un resultado relevante, podemos decir que en Cuba el juego de la malla alta no atraviesa por un buen momento.

Por si todo esto no fuera suficiente, la Federación nacional de la disciplina decidió recientemente no inscribir al combinado masculino para la próxima Liga Mundial, ni al femenino para el Grand Prix, los principales eventos anuales de esta disciplina, y a los cuales habían clasificado ambos planteles.

La decisión es bastante lógica desde cierto punto de vista, pues implicaba el pago de la cuota de inscripción ascendente a más de 300 mil dólares entre ambos planteles, un monto que iba a ser imposible de recuperar en el evento, por el estado actual de calidad de las nóminas caribeñas.

Si no se logró en los últimos años, con cierta estabilidad tendiente al alza entre los hombres, mucho menos se iba a conseguir ahora, con el recambio forzado tras lo ocurrido en Finlandia. De esto último vale añadir a lo ya comentado con anterioridad que en definitiva fueron sancionados a cinco años de prisión cuatro de los cinco acusados (Ricardo Calvo, Rolando Cepeda, Osmany Uriarte, y Abraham Alfonso), y el quinto (Luis Tomás Sosa) deberá cumplir tres y medio.

Las mujeres no han sufrido bajas notables, pero su nivel no les permite tampoco pensar en que sean capaces de acceder a las instancias decisivas y, por ende, mejor remuneradas del Grand Prix.

Todo esto incidirá inevitablemente en una falta de fogueo de los nuevos integrantes de los seleccionados antillanos, y posiblemente desencadene nuevas “fugas”, porque la motivación estará por el suelo, salvo para aquellos pocos que logren un contrato en un club profesional.

La disyuntiva está abierta para las autoridades de este deporte, que aunque tomaron la decisión de ausentarse de los principales escenarios internacionales forzados por las circunstancias, no podrán escapar de las consecuencias mencionadas.

Al respecto los aficionados comentaron a Havana Times con cierto pesimismo, porque el futuro no se vislumbra muy luminoso que digamos.

“Ya se veía venir otro golpe con lo de Tampere”, dice Máximo. “Todo apuntaba a que eran culpables, y así se demostró. Ahora a empezar de nuevo, porque cuando salgan de la cárcel ya no les quedará voleibol para jugar, pegados o pasados de los 30 años. Cuando no es una cosa, es la otra con el voleibol cubano.”

“Yo creo que hicieron bien con no ir a la Liga y al Grand Prix”, comenta Claribel. “Con todos los problemas que hay aquí no es para estar gastando dinero por gusto en unos equipos que no van a hacer nada. En estos últimos años no han sido capaces ni de ganar en su nivel, que no es el primero ni mucho menos, así que no podíamos esperar un milagro en esta ocasión.”

“Estoy de acuerdo con usted”, interviene Raiko. “Con ese dinero se puede garantizar la presencia de los equipos cubanos en varios torneos, sobre todo, los juveniles, que a veces se pierden los Mundiales de sus categorías porque no hay presupuesto. Me parece muy bien lo que se ha dicho de tratar de que los jóvenes transiten por sus edades sin forzarlos demasiado. Además, el mejor año para hacer eso era precisamente este, cuando no hay grandes eventos multideportivos (Centroamericanos, Panamericanos ni Olimpiadas), ni tampoco Campeonatos Mundiales de voleibol.”

“Sí”, interpela Julio Alfredo, “pero luego se van a quejar cuando llegue la próxima Olimpiada de que les faltan partidos internacionales de fogueo, y serán precisamente estos que van a dejar de jugar este año.”

“Mi amigo”, le responde Raiko, “esos partidos, que los jueguen en las Ligas de Europa y América de manera individual. Lo que hace falta es que sean más los contratados para tener más gente con esa experiencia. Hasta ahora no han sido tan efectivos los que estaban en Europa cuando se ponen la camiseta del Cuba. A lo mejor si son más, se les exige menos y pueden rendir con mayor tranquilidad. El engranaje colectivo lo pueden obtener en un concentrado de par de semanas, como hace todo el mundo.”

“A mí lo que parece es que ya no saben lo que van a hacer, porque se pensó que con eso de las contrataciones estaba todo resuelto y además de no tener resultados ahora también se salieron de plato (se equivocaron) los jugadores. No sé si lo que querían era evitar otras salidas al exterior para ahorrarse problemas de ese tipo”, apunta Boris.

“No creo”, le responde Lázaro Manuel. “Me parece que han tenido todos bastante escarmiento con esto que ha pasado. Dudo mucho que alguien más saque la pata (se atreva) en el futuro. En todo el mundo se es muy cuidadoso con ese tema del acoso y el abuso sexual, y me parece que ya han aprendido la lección.”

“Eso esperamos todos, porque ya con los escándalos frecuentes de los peloteros cubanos en las Grandes Ligas tenemos bastante. Después se dice que están muy bien preparados y educados, pero ya son unos cuantos los que han tenido problemas por golpear a sus parejas, por ejemplo. Es un reflejo de la sociedad, no les echo las culpas a ellos, pero se supone que cuando sales a representar a Cuba en el exterior te explican muy bien lo que se puede y no se puede hacer”, señala Moisés.

“Yo estoy seguro que eso lo sabían”, interviene Yaikel. “Lo que pasa es que al calor de la situación perdieron la cabeza. Lo que hace falta es que esto no se repita, y que poco a poco volvamos a tener buenos equipos.”

One thought on “Toca fondo el voleibol cubano

  • Habra que cambiar el nombre al volleybool cubano y ponerle el deporte de la malla baja.

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