Régimen incrementa persecución contra movimiento campesino

Varios líderes de Consejo Nacional por la Defensa de la Tierra, el Lago y la Soberanía estan exiliados, detenidos ilegalmente o en casas de seguridad en Nicaragua.  Foto: Carlos Herrera / Confidencial

“Es una venganza del régimen contra todos los campesinos”, asegura Henry Ruiz, exiliado en Costa Rica

Seis líderes están presos por supuesto crimen organizado, terrorismo, asesinato y otros delitos; varios más exiliados en Costa Rica o clandestinos

Por Maynor Salazar  (Confidencial)

HAVANA TIMES – El régimen de Daniel Ortega y su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo ha incrementado la persecución política contra el movimiento campesino, que desde cuatro años antes del estallido social del pasado 18 de abril, le había retado con al menos cien movilizaciones contra la concesión del canal interoceánico.

Al menos seis líderes campesinos, entre ellos el actual coordinador del Consejo Nacional por la Defensa de la Tierra, el Lago y la Soberanía, Medardo Mairena, están presos y son acusados por supuesto crimen organizado, terrorismo, asesinato y otros delitos, en procesos que organismos de derechos humanos identifican repletos de vicios e ilegalidades.

Los campesinos Medardo Mairena, Silvio Pineda y Pedro Mena, en una foto del juicio a puerta cerrada, tomada por el fotógrafo de la Presidencia, Jairo Cajina. Tomada de El 19 Digital | Confidencial

La dictadura de Ortega ha capturado a cinco de los 15 líderes que integran el Consejo Nacional. Mientras de los otros diez, cinco están en el exilio en Costa Rica y el resto permanece en casas de seguridad en Nicaragua.

Mairena y el tesorero del Consejo, Pedro Mena, fueron los primeros dirigentes campesinos en ser capturados por la Policía Nacional. También han sido encarcelados los fiscales del Consejo Nacional: Lenner Fonseca y Ronald Henríquez, y el dirigente territorial Víctor Manuel Díaz. El campesino y miembro del Consejo, Freddy Navas, quien estaba oculto en una casa de seguridad en un barrio de la capital, también fue capturado el fin de semana reciente, y acusado ahora por supuesto terrorismo y otros delitos.

Desde Costa Rica, el secretario del Consejo Nacional, Henry Ruiz, dijo a CONFIDENCIAL que su decisión de exiliarse fue por la persecución y la represión que el régimen dirige contra los manifestantes que se oponen a su Gobierno. Las detenciones de Mairena, Mena, y demás líderes, alertó sobre la posible captura del resto de dirigentes, sin embargo, afirmó que en el país están otros líderes que continúan trabajando para la liberación de Nicaragua.

Freddy Navas, presentado este jueves por la Policía Nacional, para ser procesado por diversos delitos, igual que otros cinco líderes campesinos. Foto: Tomada de El 19 Digital

“Lo que ha hecho Ortega es algo que no podemos aceptar. A pesar de que él viene de una familia campesina nos ha atacado indiscriminadamente. Sabemos que es una venganza del régimen contra todos los campesinos porque ha sido el único movimiento creíble que ha movido las masas, que no ha permitido ni va a permitir dejarse manosear por un partido político. La conexión entre campesinos y estudiantes, jóvenes y comerciantes, no ha sido de su agrado, y por eso nos está pasando factura”, resaltó Ruiz.

La Policía Nacional presentó a Navas este 22 de noviembre y lo acusó de asesinato, crimen organizado, secuestro, lesiones gravísimas, asalto, tenencia ilegal de armas de fuego y entorpecimiento de los servicios públicos. Yadira Torres Bermúdez, esposa del líder campesino, dijo que el único delito de su esposo es pertenecer al Movimiento Campesino y protestar en contra del régimen Ortega Murillo.

Fortalecen lazos en Costa Rica

En Costa Rica, los campesinos exiliados aseguran que continúan fortaleciendo los lazos con los dirigentes estudiantiles, y de otras organizaciones que también han tenido que huir de la persecución del régimen. Ruiz enfatizó que el objetivo es retornar al país pues aquí están sus familiares. Señaló que rechazan el llamado a la paz y la reconciliación que Rosario Murillo quiere convertir en ley, pues “no puede promover esto cuando hay dos asesinos en el poder.

“Uno de los planes es regresar a Nicaragua. Nosotros estamos claros que Costa Rica no es nuestra patria y el Gobierno de Nicaragua sabe que nos está robando nuestra libertad. Por eso estamos en la obligación de regresar a Nicaragua, vamos a regresar los 30 000 refugiados y en una caravana, porque esa es nuestra patria y vamos a reclamarla porque tenemos derecho”, expresó Ruiz.

El dirigente campesino afirmó que han tenido la oportunidad de hablar con los familiares de los presos políticos y estos han relatado la complicada situación que padecen en las celdas de “El Chipote” o La Modelo. Insistió en que el objetivo de todos los nicaragüenses que están en Costa Rica es fortalecer la unidad de los grupos y regresar a Nicaragua para sacar a Ortega del poder.

Cuatro dirigentes campesinos exiliados

El otro rostro del liderazgo campesino, y excoordinadora del Consejo Nacional, Francisca Ramírez, se ha visto obligada a exiliarse en Costa Rica, donde ha coincidido con otros campesinos.

  • Francisca Ramírez

Es la imagen del Movimiento Campesino. Durante los meses más violentos de la represión del régimen de Daniel Ortega, fue muy activa y plantó cara junto con sus compañeros en el levantamiento de los tranques en todo el país. Se exilió hace un mes en Costa Rica. Dejó sus fincas y demás pertenencias, ubicadas en La Fonseca, Nueva Guinea.

  • Juanita Juárez

Originaria de Moyogalpa, Ometepe, en Rivas. Es primer vicecoordinadora del Movimiento Campesino. También está exiliada en Costa Rica.

  • Elva Montiel

Vivía en El Jícaro, municipio del departamento de Nueva Segovia. Es la segunda vicecoordinadora del Movimiento Campesino. Igualmente está en Costa Rica.

  • Henry Ruiz

Vivía en Ometepe. Denunció a nivel regional la represión del régimen. Se exilió en Costa Rica. Es el actual secretario del Movimiento Campesino.

En Nicaragua aún permanecen cinco líderes campesinos que son parte del actual Consejo Nacional, y están ocultos en diferentes casas de seguridad. Sus nombres no se revelan para no comprometer su integridad física ni la de sus familiares y conocidos.