«No vemos comida ninguna», admite un alto cargo del PCC

tras sobrevolar Pinar del Río

Ejemplo de la destrucción en Pinar del Río.

La empresa estatal Frutas Selectas no ha pagado aún los frijoles que entregaron los productores privados en febrero

Por 14ymedio

HAVANA TIMES – El panorama agrícola de Pinar del Río es desolador tras el paso del huracán Ian. Un recorrido en helicóptero sobre los campos de la provincia occidental ha llevado a Félix Duarte Ortega, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), a expresarse con una franqueza inhabitual: «No vemos comida ninguna» en esas tierras.

Duarte, quien es el jefe del Departamento Agroalimentario del Partido, aseguró en una reunión con productores locales que Pinar del Río «tiene más de 12.000 hectáreas afectadas». Después de preguntarse: «¿Qué vamos a comer en los próximos días?», se contestó a sí mismo: «Comeremos lo que seamos capaces nosotros mismos de salir [sic] ahora con un compromiso a sembrar alimentos».

El funcionario apostó «sobre todo» por «los cultivos de ciclo corto», entre los que se incluyen vegetales, legumbres y otras especies que puedan ser cosechadas en un breve plazo de tiempo. «Tenemos que salir con un compromiso de revertir esta situación», subrayó Duarte. Entre los campesinos que asistieron a la reunión con el funcionario, algunos plantearon los distintos problemas para recibir tierras en usufructo y las limitaciones para el cultivo del arroz.

En la reunión, en la que también estuvo presente el viceprimer ministro, Jorge Luis Tapia Fonseca, se informó que la empresa estatal Frutas Selectas ha faltado al contrato con los campesinos de San Juan y Martínez y «no les ha pagado las producciones de frijoles que les vendieron en el mes de febrero», explicó el periodista Lázaro Manuel Alonso en un reporte para el Noticiero Nacional.

«Mi casa sufrió daños en el techo, pero lo peor lo estamos pasando con los cultivos, que están totalmente destrozados»

La situación es especialmente tensa en Pinar del Río, donde hay 63.133 viviendas dañadas de las que 7.107 son derrumbes totales. Muchos de esos residentes se han quedado sin suministro de alimentos debido al deterioro de sus reservas, la pérdida de cultivos, el cierre de caminos y el daño sufrido en más 429 bodegas de mercado racionado.

«Todos nuestros sembrados de plátano, frutabomba y tabaco están destruidos», comenta a 14ymedio Norges Valenzuela, productor de San Juan y Martínez. «Mi casa sufrió daños en el techo, pero lo peor lo estamos pasando con los cultivos, que están totalmente destrozados». La familia de Valenzuela todavía no tiene luz y se ha trasladado a la ciudad de Pinar del Río.

«Lo peor llega ahora, que es el robo y el saqueo», teme el agricultor. «Allá en la finca se quedaron mis dos hermanos para vigilar la casa, la bomba de agua y lo poco que nos quedó, pero yo tuve que venir con mi padre para Pinar, porque él tiene Alzheimer y no podía mantenerlo en esas condiciones en que nos dejó el huracán».

La familia Valenzuela perdió también «animales porque se cayeron varias cercas con los vientos y porque, a pesar del huracán, siempre hay quien aprovecha estas situaciones para robarse lo que no le pertenece». En la lista de lo que desapareció hay gallinas, carneros, al menos dos cerdos y un ternero. «Si sacamos cuenta son miles y miles de pesos que ya no vamos a recuperar, pero lo peor viene ahora porque mi familia come fundamentalmente de lo que se produce en la finca y no creo que vayamos a poder cosechar algo rápido».

Los agricultores como Valenzuela están «molestos» con la llegada de numerosos funcionarios oficiales. «Llevamos años reclamando por los pagos de nuestros productos, porque el Estado nos paga mal y con retraso, pero ha tenido que pasar un ciclón por esta zona y destruirlo todo para que ahora vengan los altos dirigentes a reunirse con los guajiros», añade Luis González, un productor tabacalero de San Juan y Martínez que recientemente catalogó la situación de «zona de desastre total».

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